El parón de selecciones ha dejado un récord negativo para el FC Barcelona después de que varios efectivos de la plantilla de Xavi Hernández cayeran lesionados. Los primeros fueron Jules Kouné y Memphis Depay. El zaguero no pudo continuar el compromiso ante Austria donde estaba en juego la permanencia en la Liga A de la UEFA Nations League, mientras que el neerlandés tuvo que salir sustituido durante el cruce ante Polonia.
A ellos se le sumó Frenkie de Jong, quien se quedó en el banquillo tras disputar la primera mitad ante el seleccionado de su compañero Robert Lewandowski, aunque el pronóstico es que el alcance de su menoscabo seríaa de corta duración. Por último en la lista de 'caídos' figura Ronald Araújo. El uruguayo pidió el en los primeros 5' minutos del amistoso ante Irán debido a unas molestias en su muslo derecho, por lo que será baja y su evolución marcará disponibilidad.
Por suerte, no todo ha sido opaco para el Barça. Raphinha ha demostrado en su llamado a la Seleçao que puede ser protagonista para Tite durante el Mundial de Catar. El ex Leeds United dejó una asistencia y mantuvo un ritmo impresionante en la victoria (3-0) ante Ghana, donde jugó 80' minutos antes de abrirle paso a Rodrygo para que se sumara al tridente ofensivo.
Ter Stegen dejó dudas
Caso opuesto al de Raphinha fue el de Mar-André ter Stegen con Alemania. El guardameta volvió a la titularidad por su buen momento en Barcelona, donde ha sumado atajadas importantes y ha mantenido cinco veces su portería en cero, marcando su mejor arranque individual desde que fichó por los catalanes en 2014. No obstante, no todo salió como él deseaba en su regreso al once.
Después de un tiro de esquina servido por Dominik Szoboszlai, el meta se quedó 'anclado' bajo los tres palos sin salir, lo que dio libertad para que Ádám Szalai rematara de cabeza y anotara el único tanto del compromiso. Esta derrota dejó sin chances a los germanos de disputar el 'Final Four' de la UEFA Nations League, donde se posicionaban como uno de los favoritos.