El amargo adiós de una leyenda: Cronología inversa del ‘caso Messi’

Los medios de comunicación no han parado de darle cobertura al adiós de Lionel Messi. Están obsesionados, y como debe ser, en reconstruir el fin de la era del  ‘10’ en el FC Barcelona. Y es que, el barcelonismo entero sigue padeciendo de esta dura ruptura. Cuesta aún creer que la ‘Pulga’ no vestirá la camiseta azulgrana de cara a la naciente temporada.

Por tanto, sigue vivos cada suceso ocurrido en el ‘caso Messi’. Los medios solo se han encargado de darle vida a esos hechos que siguen ahí, latentes. ¿Qué pasó entre ambas partes desde el lunes 2 de agosto que Joan Laporta aseguró que “todo va bien” hasta el frío comunicado del Club del jueves 5? La presión de los avalistas, la tozudez de Tebas, el arrebato presidencial ante el padre… “Averigüen en el Club”, dijo Jorge Messi.

Ha quedado claro que aún restan muchos cabos sueltos del ‘caso Messi’. No todo está dicho, la información ofrecida por el club azulgrana y el entorno del astro argentino no termina de conformar la historia completa. Sin embargo, más pronto que tarde se sabrán los detalles.

En este orden de ideas, hay un hecho anterior que lo hace todo todavía más incoherente. Messi expuso en París, a la BBC, que “en diciembre ya les dijimos a los niños que nos quedábamos”. Entonces, ¿por qué escondió siempre su decisión? El calendario tenía su lógica. 10 días después del 2-8 manda el burofax para irse y Bartomeu se aferra a su contrato. Cuando Bartomeu dimite en octubre, su panorama empieza a esclarecerse.

Así pues, Tusquets se encargó de convocar las elecciones a la presidencia del club azulgrana para el 24 de enero. En esa fecha, Leo ya ha comunicado a la familia que se quedan. En plena recogida de firmas, Messi concede la entrevista a Évole. Para ese 27 de diciembre, calculadamente, dice “no tengo nada claro, hasta que termine el año voy a esperar y en junio se verá”. Desde entonces, ni una palabra.

Quería seguir en el club

Sí habló en el campo. Leo, en el primer tramo de temporada, marcó 10 goles en 18 partidos. Ya en 2021, queriéndose quedar, 28 goles en 28 encuentros. A Évole le justificó ese arranque de curso: “me costó al principio, no estaba donde quería”. Así lo demostró, quería quedarse. Aceptó todas las condiciones… ¿Laporta le dio la espalda? Las razones siguen en el aire.