El mercado de fichajes de invierno encara su recta final, y el FC Barcelona sigue siendo protagonista. Los catalanes ya han cerrado algunas cesiones y podrían concretar varios movimientos más, aunque más allá del debate sobre el nueve, la mayoría de sus negociaciones apuntan al filial. Antes del último partido de la Juventus en la Serie A, la prensa abordó a su director deportivo, que admitió que existen negociaciones con los culés.
En una breve entrevista para 'Sky Sports', Fabio Paratici explicó en qué consisten las conversaciones que desde hace semanas les relacionan con la entidad barcelonista. Varios medios han informado sobre los intereses cruzados que conectan Turín con la Ciudad Condal, y el responsable de la planificación de los 'bianconeri' dio detalles sobre por qué se puso en marcha una atípica operación de trueque entre promesas.
Instantes antes del duelo contra el Parma, el de Piacenza reveló que los piamonteses no están del todo convencidos con Matheus Pereira, un centrocampista brasileño que ha sido ofrecido a los azulgrana: "Estamos hablando con el Barcelona de dos chicos. Hemos tenido algunos años con nosotros a Matheus Pereira, un buen jugador, técnico, pero que necesita un determinado tipo de juego para expresar su mejor nivel".
"Además, hemos visto un jugador suyo, Alejandro Marqués, que tiene características de típico delantero para el fútbol italiano y estamos procediendo porque pensamos que la jugada puede ser buena para ambos clubes", señaló, haciendo referencia al hispano-venezolano, que ha perdido protagonismo en el Barça B y que con sus 1,9 metros y su facilidad para moverse en el área podría hacer carrera en Italia.
El trueque Bernardeschi-Rakitic pierde fuerza
Más allá de este caso concreto, Paratici también habló del trueque entre Federico Bernardeschi e Ivan Rakitic, que se aparcó el pasado verano porque no seducía al Barça. "Fue una idea surgida en verano y ahora puedo decir que no hubo interés concreto", comentó, confirmando que pese a las negociaciones de última hora por el de Möhlin, el intercambio nunca fue una vía que pudiera desembocar en un acuerdo.
A pesar de todo, a final de temporada podría volver a estar sobre la mesa el traspaso del croata, que está cerca de los 32 años y ha cumplido un ciclo en el Camp Nou. Con su renovación bloqueada -acaba contrato en 2021- porque no hay margen debido a los límites de la masa salarial, los culés se plantean hacer caja con su venta y reinvertir los ingresos en la reforma que se prepara en la plantilla.