Xavi Hernández y Marc-André ter Stegen dejaron claro este miércoles en rueda de prensa que el futuro de Ousmane Dembélé aún no está todo lo decidido que parecía estar hace unas semanas. El francés ha vuelto a jugar con el FC Barcelona y tanto su entrenador como sus compañeros están encantados con él. En el caso del de Terrassa, confirmó que es un jugador que le gusta y en el que confía, y por eso no cerró la puerta a su continuidad.

"Vamos a ver. Ousmane acaba contrato en junio. Yo lo veo feliz y ha sido un gran profesional. Sabiendo que no iba convocado, ha sido un profesional. Se está cuidando, entrena bien, es positivo con el grupo. Por eso hemos decidido que juegue con el equipo. Si hubiera sido un mal profesional sería otra cosa. Vamos a ver lo que pasa de aquí a final de temporada. Es un futbolista que me gusta", destacó.

El egarense siempre ha tenido buenas palabras para 'Dembouz' y antes de que se abriera el mercado de fichajes en enero hizo todo lo posible para que renovara. Tras levantarle el castigo que le impuso el club por negarse a renovar, el catalán parece tener esperanzas de convencer al atacante en los meses que restan de campaña. Será una misión complicada, ya que el problema es de dinero, pero el ex del Al-Sadd no tirará la toalla.

Por su parte, Ter Stegen, aunque no quiso meterse en la decisión que tome el galo, sí dejó claro que el vestuario quiere que siga. "Son decisiones de cada uno. Él tiene contrato hasta final de año. Ahora, como equipo, queremos que siga con nosotros. Tiene mucha calidad y lo queremos aprovechar. La decisión será suya. Yo no me meto en cosas que no son mías. Es un jugador que marca diferencias y queremos que siga". apuntó.

La pelota está en el tejado de Dembélé

Habrá que ver si al final entre los jugadores y el cuerpo técnico acaban convenciendo a Dembélé para que reconsidere su futuro. A día de hoy, la ampliación del extremo con el Barça está muy lejos debido a sus exigencias económicas. Solo si el internacional 'bleu' aceptara la rebaja que le impone la entidad habría opciones de que siga en el Camp Nou. La pelota, por lo tanto, está en su tejado de aquí a final de campaña.