Hay jugadores egocéntricos, y luego está Cristiano Ronaldo. El atacante portugués del Real Madrid se mostró eufórico tras conquistar el Balón de Oro 2017, el quinto de su carrera futbolística, y durante la entrevista que mantuvo después con David Ginola y otros miembros de la revista 'France Football' no dudó en asegurar que, en su opinión, es "el mejor jugador de la historia".

Al menos esa es la frase con la que aparece en la portada de la publicación francesa. "Me siento muy feliz, es un momento fantástico en mi carrera. Llevo mucho tiempo esperando esto. El año pasado hicimos una temporada estupenda, ganando Champions League y Liga, y, a nivel personal, fui Pichichi de la Champions; estos trofeos ayudan a ganar este individual, así que doy las gracias a mis compañeros en el Madrid y en la selección portuguesa, que han sido muy importantes para mí, y al resto de la gente que me ha ayudado a estar aquí", dijo en primera instancia.

"Todo ayuda. Los detalles pequeños hacen la diferencia: el cuerpo, la mente..."

"Es un gran honor. No esperaba tener un Balón de Oro... Lo soñaba, pero sabía que era muy difícil ganarlo. Sin embargo, desde que gané el primero dije que era posible un segundo, trabajé y me ha ayudado mucho ganar títulos con mi equipo y con mi selección", añadió.

Al parecer, Cristiano siempre supo que era un jugador especial. "Desde que tenía 14 o 15 años sabía que era especial, diferente a los otros chavales, hacía cosas diferentes. Cuando estaba en el United, donde empecé a jugar con jugadores increíbles como Robbie Keane, Ferdinand o Van Nistelrooy, me di cuenta de que tenía talento, de que podía ganar el Balón de Oro".

"No pensaba que iba a igualar a Messi porque llevaba cuatro y era complicado"

"Eso fue en mi primer año allí. Ferguson estuvo increíble conmigo, fue mi padre futbolístico, me enseñó muchas cosas, como cómo ser profesional y entregarme a este deporte. En ese momento no sabía qué hacer: tenía talento, pero no sabía cuándo pasar, cuándo hacer un regate... Fue duro conmigo, pero me ayudó mucho", recordó el futbolista portugués.

Aseguró que no piensa demasiado en la competitividad con Leo Messi. "¿Si eso me motiva? Puede ser, pero no lo pienso mucho. Quizá en mi subconsciente sí, puede ser, pero yo soy mi motivación, sigo peleando contra mí mismo para superarme. Es bueno luchar con Messi de buena forma: siempre quieres ser el mejor, ganar más títulos... Estoy muy motivado aún. Cuando me despierto, estoy motivado por ir a entrenar. Eso es lo mejor. Pero las cosas cambian muy rápido: un día estás muy motivado y otro puede cambiar...".

Cristiano vive por y para el fútbol

Eso sí, llegará un día en que Cristiano pierda la motivación. "Va a pasar, pero no estoy preparado para eso. Pero bueno, algún día ese momento llegará. No pienso mucho en ello; estoy disfrutando mucho de este momento. Me siento muy bien y muy fuerte".

Cristiano vive para el fútbol desde hace muchos años. "Todo ayuda. Los detalles pequeños hacen la diferencia: el cuerpo, la mente... Tienes que ser profesional, no puedes vivir el fútbol sólo dos horas y llegar a casa y hacer lo que quieras. Tienes que ser profesional y serio, cuidar de tu cuerpo... Intento hacer las cosas correctas. El cuerpo es importante: si tienes un buen cuerpo, puedes luchar contra cualquier cosa. Siempre intento cuidar mi cuerpo, la comida y dormir, que es muy importante; la gente no sabe lo importante que es".

Y no pensaba que conseguiría igualar a Messi. "No pensaba que iba a igualar a Messi porque después de que llevara cuatro pensé que sería complicado, pero las cosas cambian, el fútbol te da la oportunidad de seguir trabajando y tener la ambición de querer ganar, y, gracias a Dios, gané".

Eso sí, ha tenido que sacrificar muchas cosas. "Para ganar un Balón de Oro tienes que sacrificar un montón de cosas, tienes que cambiar tu vida, ser muy serio y profesional. Pero no es sólo eso: hay muchos jugadores que lo hacen y no lo han ganado. Hago trabajo inteligente en casa: la clave es la calidad del entrenamiento. Poco trabajo, pero bueno. La diferencia entre hacer nada o poco es mucha".