Con el resultado del Inter-Viktoria Plzen en la cabeza, los jugadores del FC Barcelona completaron otra decepcionante actuación ante el Bayern Múnic (0-3). Nuevamente, los culés se despiden en la fase de grupos de la UEFA Champions League sumando solo cuatro de nueve puntos en el Spotify Camp Nou, donde el miércoles el conjunto bávaro se impuso con autoridad por idéntico marcador que en su última visita a Catalunya la temporada pasada. A continuación, en 'FCBN' analizamos las actuaciones de los jugadores uno a uno en la durísima caída ante el conjunto alemán:
Ter Stegen: Sacrificado
El portero alemán sacó lo que pudo, pero igualmente encajó tres tantos ante un Bayern que ni siquiera necesitó de su compatriota Manuel Neuer para mantener el arco en cero. Ter Stegen evitó el 0-3 sobre el descanso con una atajada notable en la jugada que derivó en el penalti no pitado sobre Robert Lewandowski. En la segunda parte, el '1' también tuvo un par de intervenciones que evitaron una goleada mucho peor.
Héctor Bellerín: Superado
El lateral regresó después de un mes afectado por una lesión en el sóleo de la pierna izquierda y lució desbordado por Sadio Mané y Leon Goretzka durante todo el partido. El senegalés le ganó la espalda con facilidad en la jugada del primer gol y se quedó enganchado en la jugada del 0-2. En la segunda parte, mejoró levemente en la marca, pero cuando los bávaros quisieron atacar por derecha siempre encontraron facilidades.
Jules Koundé: Errático
El central completó su peor partido como culé ante el Bayern. En la primera parte erró muchos pases y se notó nervioso e impreciso. Xavi le sacó en el minuto 68 por Eric García, ya cuando el partido lucía sentenciado. Choupo-Moting fue su eterno dolor de cabeza mientras estuvo en campo.
Marcos Alonso: Perdido
Al lateral izquierdo se le vio incómodo en el rol de central y dejó muchos espacios en el fondo que, entre los malos pases de Koundé y las salidas a destiempo de Bellerín, fueron aprovechados por Mané y Choupo-Moting para liquidar el partido en os primeros 45 minutos. Claramente, a Xavi le salió mal el experimento con el madrileño, quien a pesar de todo aguantó los 90 minutos en el campo.
Álex Balde: Cumplidor
Xavi apostó por Balde en un partido durísimo y el canterano no acusó la inexperiencia lógica a sus 19 años. Álex intentó colaborar en ataque para combinarse con Pedri y Ansu en la segunda parte, pero frecuentemente le ganaron la espalda y su carril fue blanco fácil para las internadas de Serge Gnabry. Aún así, fue el mejor de la defensa del Barça.
Sergio Busquets: Amonestado
Al capitán se le vio más suelto con la presencia de Franck Kessié, pero no logró darle al Barça el manejo que tanto necesita para dominar los partidos. La impotencia de ver al equipo superado le hizo acabar la primera parte amonestado por una falta sobre Jamal Musiala. Sobre la hora de partido dejó su lugar a Ferran Torres con algún silbido desde la grada. Sin dudas, está siendo una temporada dura para el '5'.
Franck Kessié: Testimonial
La presencia del marfileño no surtió ningún efecto en el juego culé. Superado en la marca, no logró participar en ofensiva tanto como suele hacerlo en LaLiga y, por momentos, se le vio perdido en el campo, sin saber si juntarse más con 'Busi' o soltarse al igual que Frenkie de Jong. Para el Bayern, el control del mediocampo fue total en una primera parte en la que resolvió el partido.
Frenkie de Jong: Impreciso
Xavi apostó por el neerlandés para intentar adueñarse del balón desde el arranque, pero De Jong no estuvo fino. Falló varios pases y, cuando se proyectó al ataque, se le vio pasado de revoluciones y no logró conectar con Pedri por izquierda. A pesar de sus imprecisiones, jugó los 90 minutos de un partido muy gris para el mediocampo culé.
Pedri: Incómodo
Pedri volvió a posicionarse como extremo por izquierda, pero nunca terminó de acomodarse. Si bien tiró un par de caños para demostrar su calidad, pesó poco por la banda y Xavi le reemplazó sobre la hora de partido por un Raphinha que tampoco hizo la diferencia.
Ousmane Dembélé: Rebelde
El francés fue quien más buscó inquietar a los defensor del Bayern tirando diagonales y desbordes por derecha. Suyo fue el pase que acabó con Lewandowski derribado por De Ligt en la jugada del penalti que el colegiado Anthony Taylor optó por no señalar tras revisar la jugada en el monitor. La energía de Dembélé se fue disipando en el complemento y cayó en una actitud monopolizadora, queriendo resolver todo por cuenta propia.
Robert Lewandowski: Frustrado
El '9' acabó el partido frustrado, nuevamente, por no poder convertir ante su ex club. El polaco intentó combinarse con Dembélé y Pedri, pero apenas tuvo una intervención clara en todo el partido: la jugada del penalti no sancionado en favor del Barça. En la segunda parte, tocó muy poco el balón.
Ferran Torres: Incógnito
El delantero acabó jugando como segunda punta junto a Lewandowski, pero inquietó poco a la defensa bávara. Las imprecisiones colectivas del equipo le privaron de tener más llegada en la media hora que estuvo en campo. El de Foios, eso sí, sigue contando con la confianza de Xavi.
Raphinha: Aislado
Se instaló por derecha y falló varios pases. Intentó desbordar sin suerte y apenas pesó en ataque, dando la razón a un Xavi quien prefirió dejarle en el banquillo y poblar la mitad del campo con Kessié y De Jong. Al brasileño, claramente, le cuesta ingresar en el complemento.
Eric García: Suplente
Otro que justificó su suplencia fue Eric García. El central ingresó por Koundé a falta de 20 minutos y el Barça nunca logró superar el desorden en el fondo. Salió en la foto del tercer tanto bávaro en la última jugada del partido, donde toda la zaga se quedó observando cómo Gnabry fusilaba a Ter Stegen.
Ansu Fati: Aplaudido
El '10' generó los únicos aplausos de la afición culé en una noche para el olvido con varios desbordes que inquietaron el costado derecho de los muniqueses. Con sus acciones individuales merodeó el gol, pero siempre se encontró con alguna pierna bávara en el camino cuando pisó el área.
Pablo Torre: Participativo
En los 10 minutos que pudo jugar, el mediocentro se mostró participativo, intentando dar salida a un equipo totalmente roto en el tramo final. Habrá que ver qué hace el club con él en la segunda parte de la temporada, porque claramente no tiene sitio en el esquema de Xavi.