Corría el minuto 33 de partido cuando Francisco Trincao, en una internada con balón en el interior del área, fue semi-derribado por la presión defensiva de dos jugadores del Dynamo de Kiev, que le arrebataron el esférico tocando balón y también la pierna del extremo portugués. Trincao y varios de sus compañeros reclamaron penalti, de la misma manera que Koeman y algunos de los suplentes.
El colegiado, sin embargo, desde un principio tomó la decisión de no señalar nada y, una vez la pelota hubo salido a saque de banda, desde el VAR tardaron apenas unos segundos en decirle que no había infracción, y que el juego debía continuar. Seguramente en cualquier otra parte del campo esa jugada hubiese acabado en falta, pero al ser dentro del área los árbitros consideraron que no era suficiente el contacto para señalar la pena máxima.
Lo cierto es que al FC Barcelona le habría venido de perlas que se señalara el penalti, teniendo en cuenta la falta de profundidad (especialmente por las bandas) que le faltó al conjunto de Ronald Koeman a lo largo de los primeros 45 minutos, dominante con el balón y también en la recuperación tras pérdida, pero sin capacidad para generar oportunidades claras de gol.
El FC Barcelona tejió bien las jugadas y tuvo paciencia, pero no supo abrir el campo como debería. Con Coutinho en la izquierda y Trincao en la derecha, ambos jugadores acababan decantándose hacia el balcón del área, perfilándose así con su pierna buena para intentar el disparo o combinaciones entre un océano de piernas. Mala decisión, porque el Dynamo supo defender bien en bloque.
A Trincao sólo le falta el gol
Trincao protagonizó algún que otro disparo peligroso y progresiones interesantes desde la banda derecha, que acabaron en centros repelidos por la defensa. El joven atacante portugués no tuvo una mala actuación, pero le está costando horrores estrenarse a nivel goleador con el FC Barcelona.
Habrá que ver si, de cara al próximo partido de Liga Santander 2020-21 contra Osasuna, en el Camp Nou, vuelve a ser titular o si Koeman apuesta por colocar en su lugar a un Ousmane Dembélé que tuvo descanso este martes frente al Dynamo de Kiev. Sea o no titular, lo más probable es que Trincao siga recibiendo oportunidades de parte de Koeman en las próximas fechas.