La Champions League vuelve al Estadi Olímpic Lluís Compannys este miércoles. El FC Barcelona buscará encaminar su clasificación a los octavos de final en la visita del Shakthar Doneskt (18:45 horas), actualmente entrenado por Darijo Srna. Se hizo con las riendas del banquillo del conjunto ucraniano tras la salida de Patrick Van Leeuwen y su objetivo es dar continuidad a su condición de ídolo, esta vez desde el banquillo. 

No es un secreto para nadie que Srna fue uno de los jugadores más queridos por la afición del Shakhtar, con muchos motivos. Sumó 536 partidos con la camiseta del equipo, en quince años de trayectoria, al punto de ser uno de los futbolistas más laureados e importantes de la historia del club. Pudo haber sido muy distinto, porque tuvo la oportunidad de jugar con el FC Barcelona en 2016, cuando vencía su contrato y podía llegar como agente libre. 

Del sueño del Barça hasta el compromiso con el Shakhtar

Antes del comienzo de la temporada 2016/2017, la entidad azulgrana estaba en la búsqueda de un efectivo para reforzar el lateral derecho y el nombre de Srna estuvo sobre la mesa. De hecho, era uno de los candidatos que más fuerza tenían en la dirección deportiva azulgrana, por varios motivos: Su experiencia en el fútbol de máximo nivel, su situación contractual (tenía vínculo hasta el 30 de junio de 2016) y que había renunciado a la selección de Croacia. A pesar de que tenía 34 años, era una de las apuestas firmes del Barça. 

Sin embargo, desde el Shakhtar terminaron de convencerle para que extendiera su estadía un tiempo más. En unas declaraciones que recuerda el diario 'SPORT', el entonces futbolista había comentado que no se hubiese perdonado nunca marcharse del equipo: "Estoy convencido al cien por cien de la decisión que he tomado. Le dije al presidente que preferiría ganar la Liga con el Shakhtar que la Champions League con el Barça. Si me hubiera ido de aquí, no me lo habría perdonado nunca".

El nuevo reto de Srna con el Shakhtar

Lo cierto es que Srna no terminó de marcharse nunca de Ucrania y ha regresado nuevamente. Estuvo un tiempo de entrenador adjunto, pero ahora es el capitán del barco y las expectativas son máximas. No será fácil la aventura, pero debutó con victoria (3-0 ante el LNZ) y ahora está preparado para el reto ante el Barça. Ha dejado claro, desde un principio, que ha llegado para ayudar y hacer lo mejor que pueda para el equipo de su vida. 

Tiene la fortuna de que lleva 'ganado' el corazón de los aficionados del Shakhtar. En su presentación comentaba que "Acepté la oferta del Shakhtar porque es mi familia y cuando la familia atraviesa un momento difícil debes ayudar". Lo demostró como jugador y ahora quiere probarlo desde el banquillo, aunque ha dejado más que claro un punto: "Les dije que no soy Guardiola ni Klopp, que soy Darijo Srna, que no tengo mucha experiencia como entrenador pero que tengo un corazón de minero y que ese corazón me ha dicho que tengo que ayudar en una situación difícil para el país y para el Shakhtar".