El Real Madrid se estrenaba este miércoles en la Champions, y el PSG le hizo pasar un mal rato. En el que apuntaba a ser uno de los enfrentamientos clave para definir el liderato del Grupo A empezaron mandando los franceses, que desactivaron a los hombres de Zinedine Zidane durante los primeros 45 minutos y les enseñaron la potencia del Parque de los Príncipes.
Thomas Tuchel apostó por presionar arriba a los blancos y su apuesta tuvo premio, porque puso en apuros a sus adversarios y logró contener a una delantera que imponía con Karim Benzema, Eden Hazard y Gareth Bale. El tridente de los visitantes parecía más intimidante que el de los locales, pero en estas circunstancias apareció un viejo conocido para acaparar los focos.
Ángel Di María cumplió la 'ley del ex' y demostró una vez más que es el mejor remedio a las bajas de los 'bleus'. Aunque ha tenido sus más y sus menos con el club en los últimos tiempos, cuando han faltado Neymar, Kylian Mbappé o Edinson Cavani siempre ha asumido responsabilidades, y en esta ocasión, sin ninguno de sus compañeros en la convocatoria, se lució con un doblete.
El argentino rondó la media punta casi siempre con peligro, y suyo fue el tanto que abría la lata cuando no se había llegado al cuarto de hora de encuentro. Un error de Dani Carvajal lo hizo pagar caro Juan Bernat, que avanzó metros, metió un buen pase para su compañero y este enganchó un zurdazo desde la esquina del área pequeña que se coló por el palo corto de Thibaut Courtois, que dio la sensación de poder hacer algo más.
La reacción 'merengue' apenas se hizo notar, y quien sí lo hizo fue el de Rosario, que subió el 2-0 al electrónico. De nuevo, un robo adelantado de los parisinos y una cesión en tres cuartos de cancha sacaron lo mejor del 'fideo', que se perfiló hacia su pierna izquierda y alojó el balón en las redes con un tiro desde la frontal que el guardameta tampoco pudo sacar.
El VAR anula por mano un golazo de Gareth Bale
Y tras el segundo sí hubo respuesta inmediata del Real Madrid, pero en este caso fue anulada por el VAR. Una acción individual de Gareth Bale acabó con una preciosa vaselina del galés a un adelantado Keylor Navas, pero la tecnología hizo ver al colegiado Anthony Taylor que en uno de sus recortes, el punta golpeó el esférico con la mano. El de Cardiff lo volvió a intentar antes del paso por vestuarios, pero su disparo se marchó fuera y no hubo remedio para los males madridistas.