Si hubiéramos visto a este Barcelona en el partido de ida...

El Barcelona no fue capaz de clasificarse a la siguiente fase de la Champions League, ya que en el partido de vuelta solo consiguieron empatar a uno contra el PSG. Sin embargo, no se puede negar que la escuadra azulgrana hizo un partido por mucho mejor que el que se vio durante el partido de ida.

Existían muchas expectativas sobre si lograrían remontar contra el PSG, más aún luego de ver la espectacular remontada ante el Sevilla en la semifinal de la Copa del Rey. Pese a que no pudieron lograr la remontada, no se puede decir que los culés no la buscaron a lo largo de toda la cita.

Desde el primer minuto se lanzaron al ataque y mantuvieron la posesión del balón. Tuvieron una gran cantidad de ocasiones de peligro tanto en la primera mitad como en la segunda. Griezmann, Dembélé, Mingueza, Messi y el resto de los jugadores no se guardaron nada en aras de buscar otra remontada como la que logró el Barcelona contra el PSG en 2017.

Eso sí, no puede negarse que el partido tuvo sus contras, entre ellos: La falta de Lenglet que le dio a Mbappé un penalti para que el PSG pudiera irse arriba en el marcador. Otro puede ser la tarjeta amarilla de Mingueza que ameritó que Koeman lo reemplazara apenas en la mitad del primer tiempo e incluso el penalti de Messi que fue detenido por Keylor Navas. Sin embargo, son muchos más los pros que tuvieron los culés.

Los puntos positivos no solo son más que los negativos. Este fue un partido no cien, sino mil veces mejor que el duelo de ida celebrado el pasado mes de febrero. En esa ocasión, el PSG, más que derrotar, humilló al Barcelona 1-4 en su propia casa. Mientras que, en esta cita, los culés fueron más contundentes en el ataque y supieron gestionarse mejor en la defensa.

No hay dudas que si el Barcelona hubiese hecho un partido como el de hoy en el duelo de ida otra seria la historia. Sin embargo, lo hecho hecho está; la diferencia era muy grande y el PSG estaba decidido a no vivir otra remontada del Barcelona en Champions una segunda vez.

Pese a todos los tiros certeros al arco del combinado francés hechos por los catalanes, Keylor Navas, el guardameta de los parisinos, logró detener mucho de estos, incluyendo el tiro penal de Messi.

Estadísticas muy superiores

Tal era la determinación de los blaugranas que, en la primera parte, ya acumulaban unos 15 disparos a la portería de Keylor, quien no sería exagerado decir que fue el que salvó al PSG de otra remontada. De esos 15 tiros, 9 terminaron entre los palos del arco. Se contabilizaron cinco disparos hechos por Dembélé y cuatro de Messi, incluido su gol y su penalti detenido. También hubo un disparo de Serginho Dest desviado por el palo.

La superioridad de los liderados por Koeman también se vio en la posesión del esférico. Terminado el primer tiempo, registraron un 67% de posesión, mientras que el PSG solo tenía un 33%. El total de disparos al arco a lo largo del partido acumulados por el Barcelona fue de 21. Los franceses solo lograron siete en total, de los cuales 3 fueron desviados por uno de los palos.