La UEFA decide sancionar a Neymar con 3 partidos por criticar al árbitro del PSG-United

Neymar fue muy duro con los árbitros después de la derrota del Paris Saint-Germain contra el Manchester United en la vuelta de los octavos de final de Champions League. El PSG cayó por 1-3 con un gol de Rashford de penalti pitado por el VAR en el último minuto y se quedó fuera de Europa un año más. El brasileño lo vio todo desde la grada y explotó en redes sociales al término del encuentro.

"Es una vergüenza. Ponen a cuatro tíos que no entienden de fútbol para analizar una jugada... ¿Cómo va a poner la mano de espaldas? El penalti no existe", escribió en su cuenta de Instagram para referirse a la jugada. Lo cierto es que fue un texto precipitado y en caliente, ya que si lo hubiese pensando se hubiera dado cuenta de que el penalti fue evidente y que el PSG se quedó fuera de la Champions justamente.

La UEFA decidió estudiar el caso y finalmente le abrió un expediente el futbolista del conjunto parisino. El caso por fin se ha resuelto y la UEFA ha anunciado que el Organismo de Control, Ética y Disciplina ha decidido sancionar al '10' con tres partidos en base al artículo 15 (1) (d) del Código Disciplinario (insultos o actos de molestia a un colegiado durante un partido oficial).

Esto provocará que Neymar no pueda debutar en Champions League el próximo curso junto al resto de sus compañeros en la primera jornada de la fase de grupos. El delantero no jugará hasta el cuarto encuentro y el PSG deberá arreglárselas sin su presencia. Es una faena para el equipo y para él, ya que después de perderse esto últimos meses de competición no entraba dentro de los planes que se perdiese también el inicio de la próxima temporada en Europa.

El lío de Neymar no fue solo en redes sociales

En un primer momento parecía que el expediente era solo por sus faltas de respeto al colegiado en Instagram, pero más tarde se supo que también protagonizó un altercado violento en el Parque de los Príncipes. Tras el pitido final, el atacante intentó meterse en el vestuario de Damir Skomina, el árbitro del encuentro, para hablar con él en términos poco amistosos.

La seguridad del propio PSG pudo evitar que entrara y lo sacó de ahí para que se calmara y el incidente no fuera a mayores. La UEFA no ha podido sancionarle por eso, pero sí por su historia de Instagram. A sus ya 27 años, Neymar debería haber aprendido ya a calmarse y a pensar que sus actos pueden terminar trayendo consecuencias, como ha sido el caso en esta ocasión.