El FC Barcelona ha cerrado una de las carpetas que más le preocupaban este verano: Su participación en la fase de grupos de la Champions League 2023-2024. Se habían ganado el billete para participar en el sorteo, tras ganar la pasada edición de LaLiga, pero la investigación por el 'caso Negreira' sembró el miedo en los blaugrana porque existía la posibilidad de que la UEFA dictaminara que el club estaba incumpliendo el reglamento.
El procedimiento del organismo rector del fútbol europeo comenzó el pasado 23 de marzo, con Juan Samuel Leuba y Mirjan Koller a cargo de una investigación minuciosa para tratar de entender la relación del conjunto catalán con el ex vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), Enríquez Negreira, por casi dos décadas. El club pagó alrededor de siete millones de euros por sus servicios, pero en ningún momento -tal y como han apuntado Joan Laporta y compañía- fue para amañar partidos o ser favorecidos por el conjunto arbitral.
El Barça no ha sido sancionado por la UEFA
Este viernes se confirmó que el FC Barcelona había sido exonerado por la UEFA y que podrá participar con normalidad en la Champions League para intentar cumplir su objetivo de 'competir' y llegar lejos en el torneo, algo que ha sido imposible en los últimos años. En cualquier caso, se han desvelado todas las claves por las que han decidido no sancionar a los blaugrana por el 'caso Negreira', aunque continúan las investigaciones en España.
De acuerdo a una información a la que ha tenido acceso 'Mundo Deportivo', en el informe que han elaborado los dos investigadores han apuntado que, tras los estudios correspondientes y el cuestionario (de 70 preguntas) que respondió el Barça, no existen pruebas de que el club haya comprado en algún momento a los árbitros. Por ello, no están en la capacidad de poner una sentencia y esperarán a que la justifica española determine la culpabilidad o no de los catalanes para ver si tienen que intervenir.
El Barça no ha incumplido el reglamento
Si bien la decisión de los instructores todavía no es completamente definitiva, porque tiene que ser ratificada durante la próxima semana por el Comité de Apelación de la UEFA, en el Barça reina la tranquilidad porque entienden que el informe será suficiente para demostrar que no han incumplido el artículo 4.2 del reglamento de la Champions League, por el que estaba siendo 'señalado'.
El mismo, establece que "si, sobre la base de todas las circunstancias de hecho y de la información de que dispone, la UEFA concluye a su entera satisfacción que un club ha estado implicado directa y/o indirectamente, desde la entrada en vigor del apartado 3 del artículo 50 de los Estatutos de la UEFA, es decir, el 27 de abril de 2007, en cualquier actividad dirigida a organizar o influir en el resultado de un partido a nivel nacional o internacional, la UEFA declarará a dicho club no elegible para participar en la competición. Dicha inelegibilidad sólo será efectiva durante una temporada futbolística".