El Real Madrid se salva de un nuevo ridículo en el último minuto (2-2)

El Borussia Mönchengladbach ha puesto contra las cuerdas al Real Madrid en la segunda jornada de Champions League, después de ponerse dos goles arriba con un doblete de Marcus Thuram. Pero finalmente el conjunto de Zinedine Zidane ha conseguido dos goles agónicos de Karim Benzema y Casemiro después de una serie de balones colgados al área a la desesperada.

El Real Madrid se presentaba en tierras alemanas montado en el lógico optimismo de haber derrotado al FC Barcelona en el Clásico y, con un Zinedine Zidane que apostó por el mismo once del Camp Nou, el equipo empezó funcionando. Los blancos se adueñaron del control del juego y consiguieron encerrar al Borussia Mönchengladbach, que no tardó demasiado en abandonar la idea de presionar arriba y optó por el contragolpe.

Pero la buena noticia para el conjunto germano fue que el Real Madrid sigue sin estar fino de cara a la portería, algo que fue muy bien aprovechado. Pasada la media hora, un error de Toni Kroos propició una rapidísima jugada de contragolpe del Borussia Mönchengladbach que, en pocos toques, plantó a Marcus Thuram solo ante Thibaut Courtois, que no pudo evitar el gol.

El Real Madrid vio como su rival era capaz de transformar en gol prácticamente todas sus ocasiones y, en el minuto 58, llegó el segundo: un tiro tras un centro desde la banda propició un rechace muerto de Thibaut Courtois para que otra vez Marcus Thuram rematara en boca de gol. Una jugada que dejó muy mal parado a un Ferland Mendy que se durmió en la banda para romper el fuera de juego.

Remontada del Real Madrid

Después del segundo gol del Borussia Mönchengladbach, pudo llegar alguno más en algún contragolpe que Thibaut Courtois salvó con maertría. Fue entonces cuando llegó el ataque a la desesperada del Real Madrid con resultado positivo. Primero fue Karim Benzema, que se sacó un gran remate después de una asistencia de Casemiro de cabeza, salvando el saque de puerta.

El gol del francés había llegado en el minuto 87, lo que incrementó la fe del Real Madrid y bajó la moral de un Borussia Mönchengladbach que ni quería el balón ni sabía lo que hacer con él cuando lo tenía. En otro centro a la olla, Sergio Ramos cedió atrás y el propio Casemiro empató para salvar un nuevo ridículo blanco. Los blancos siguen colistas del grupo B de la Champions League con un punto pero, para su fortuna, la igualdad es tal que el primer puesto solo queda a tres.