Durante el choque por la primera jornada de la fase de grupos de la Champions League, el Manchester City de Pep Guardiola logró derrotar por 3-1 al Porto de Sérgio Conceição. Sin embargo, dentro de lo que parece un resultado normal, de un partido sin nada fuera de lo común, se esconde una acción que trajo muchos recuerdos del pasado, puesto que Pepe, central del club portugués, rememoró sus años dorados en el Real Madrid agrediendo a Raheem Sterling.
La acción ocurrió en el minuto 84 del partido, cuando el mismo ya se encontraba con un resultado de 3-1 y la presión empezaba a rondar la cabeza de Pepe. Durante un choque con Sterling, en el cual el delantero inglés resultó derribado, el central lusitano se acercó airadamente a recriminarle por haber intentado provocar una falta e, instantes después, el ex Real Madrid se llevó por delante a su contrario con la rodilla.
Este suceso fue increíblemente similar al que tristemente también protagonizó Pepe hace más de una década, durante un partido ante el Getafe. En ese choque, el zaguero, quien disputaba apenas su segunda temporada con el Real Madrid, derribó dentro del área a Javier Casquero y, mientras este estaba en el piso, el portugués lo pateó dos veces y luego lo apretó con fuerza, antes de irse expulsado.
Pepe, amante de atacar en el suelo
Sterling y Casquero no son los únicos jugadores que se han enfrentado a Pepe y han sufrido las consecuencias de sus repentinos cortocircuitos, que hacen que el experimentado central entre en un modo más agresivo de lo normal. Lionel Messi también conoce bien de cerca lo que es lidiar con esta faceta del futbolista de 37 años, quien suele atacar mejor cuando sus rivales están en el piso.
La memoria de todos los culés atesora con cariño cada victoria o eliminación que el FC Barcelona conquista frente al Real Madrid, pero en 2012, uno de los choques por Copa del Rey que dio como resultado la descalificación del conjunto “merengue” gracias a los blaugranas pasó al recuerdo por un incidente con Pepe, más allá de por su resultado. Concretamente se trata del pisotón de mano que el futbolista de la selección portuguesa le dio a Messi mientras este se encontraba en el suelo, pudiéndose observar antes cómo el defensor mira hacia abajo mientras camina, para asegurarse de hacerle daño al astro barcelonista.
Guardiola, contento con el partido del City