El FC Barcelona cayó este jueves en su visita al Ramón Sánchez Pizjuán y ha sido un jarro de agua fría para los culés, tras la dinámica positiva que había mostrado el equipo en las últimas semanas. El Barça había demostrado que el espíritu y fe era la clave para ganar los partidos, junto al gran desempeño de algunos de los jugadores de la plantilla, como Lionel Messi o Frenkie de Jong, pero ante el Sevilla se perdió la chispa.
A los dirigidos por Ronald Koeman no se le puede recriminar que no lucharon hasta el final por, al menos, descontar el marcador, pero fue sumamente difícil conseguir incomodar a Bono que, además de todo, tuvo una noche espectácular ante el FC Barcelona. El guardameta se vistió de héroe para los sevillanos y bloqueó todas y cada una de las acciones de los blaugrana dentro del área.
Fue un partido que, a pesar del buen rendimiento de los de Julen Lopetegui, estuvo sentenciado por dos errores concretos de Samuel Umtiti. El francocamerunés continúa sin estar fino y en Sevilla quedó retratado, al igual que frente al Granada, también en la Copa del Rey. Los errores individuales, sobre todo en la zaga defensiva, continúan siendo el Talón de Aquiles del Barça de Koeman y, con tantas bajas importantes, parece que la historia no tendrá fin por los momentos.
Pero, sí hay algo cierto, es que el FC Barcelona es el rey de la Copa y no se dará por vencido fácilmente. Es una competición que históricamente lideran los culés y en este momento no dejarán de luchar, a pesar de tener el marcador en contra con un resultado que parece difícil de remontar. Habrá que tener mucha esperanza en un equipo que en esta temporada ha conseguido cinco remontadas, casi todas épicas, desde que llegó Koeman al banquillo, y que ha demostrado que sí se puede luchar hasta el final, algo que no hicieron en el curso pasado.
Real Sociedad (1-2), Athletic Club de Bilbao (2-3), Rayo Vallecano (1-2), Granada (3-5) y Real Betis (2-3) han sido los equipos que, en esta camapaña, han creído que se iban a llevar un resultado positivo frente al Barça, pero se han topado ante un club que se ha replanteado los partidos y ha conseguido, a base de fe, remontar los resultados.
Confiar hasta el final...
Con los precedentes de los últimos tiempos, es muy complicado creer en un equipo que, en realidad, está pasando un momento de transición. Sin embargo, si hay algo que ha demostrado el Barça (en esta temporada y a lo largo de su historia) es que es necesario creer hasta el final.
Además, no hay que olvidar que la Copa del Rey es la competición de las sorpresas y que cualquier cosa puede pasar cuando comienza a rodar el balón, sobre todo en esta temporada. Para el partido de vuelta aún queda mucho y Ronald Koeman podría recuperar efectivos importantes, como Ronald Araújo y Sergi Roberto, por lo que nada puede estar descartado hasta que suene el pitazo final en el Camp Nou.