Xavi Hernández revolucionó su once en Copa del Rey respecto al que utilizó en la final de la Supercopa de España frente al Real Madrid. Los azulgrana tuvieron modificaciones en todas sus líneas, siendo Robert Lewandowski el único que repitió, porque la suspensión de LaLiga le impedirá disputar los próximos dos partidos ligueros ante Getafe y Girona.
El técnico le dio nuevamente la oportunidad a Pablo Torre de ser titular ante el AD Ceuta como uno de los tres centrocampistas del equipo, acompañando a Franck Kessié como interior y con Sergi Roberto más retrasado como pivote. De hecho, fue con el marfileño con quien más interacción tuvo durante la primera mitad, intercambiando las posiciones y siendo más activo cuando tenía control del balón.
Sin embargo, el orden defensivo del conjunto ceutí resultó complicado de descifrar para el cántabro, aunque volvió a dejar algunos destellos de que puede ser protagonista de cara al futuro. A los 24' minutos hizo una buena acción individual que solo pudo ser contenida con una falta de Adri Cuevas. Posteriormente, también probó un remate de media distancia que salió desviado de la portería a pocos minutos de que el colegiado Munuera Montero sentenciara el final de la primera mitad.
Sorpresivamente, Xavi tomó la decisión de sustituirle por Gavi de cara al complemento, en parte porque no quería arriesgar la clasificación y quería un mayor dominio en la zona medular del campo. Tras el ingreso del andaluz también entraron Sergio Busquets, Andreas Christensen, el canterano Ángel Alarcón y Ansu Fati, quien marcaría un auténtico golazo a los 70' para terminar de sentenciar el encuentro.
Tercera titularidad
Así las cosas, Torre concretó su tercera titularidad con el Barça después de sus inicios frente al Viktoria Plzen en Champions y el Intercity por los octavos de Copa. Sumado a ellos, también vio minutos en Liga frente al Athletic Bilbao y en el quinto partido de la fase de grupos de la Liga de Campeones ante el Bayern Múnich. De momento continuará en las convocatorias del técnico pero con ficha del filial, con quien estará atado hasta 2026 hasta que dé el salto definitivo al primer equipo.