¡Argentina, a 'semis'! El 'Dibu' hunde a Países Bajos en los penaltis

La bendita locura del Mundial... Lo que empezó como un enfrentamiento muy tranquilo en el que Argentina supo cómo adelantarse y mantener la ventaja por casi 85 minutos, acabó siendo una 'novela' dramática en la que Países Bajos resurgió de sus cenizas (cuando nadie le esperaba) para forzar una prórroga y posterior tanda de penaltis que acabó con la victoria de la 'albiceleste'.

El partido ha sido, como poco, una auténtica locura. La Argentina de Leo Messi pasó de tener el choque totalmente controlado (con un 2-0) a sufrir de todos los colores, con la libreta de Van Gaal haciendo efecto hoy más que nunca. Países Bajos estaba totalmente fuera y sin vida en el minuto 80, pero la historia cambió por completo en el último tramo del partido. Dieron vida al partido y dejaron un empate histórico en la última jugada del tiempo reglamentario, pero no terminaron de obrar el milagro en la tanda de penaltis. 

En el comienzo y por gran parte del partido, los entrenados por Lionel Scaloni no mostraron su versión más eficiente o brillante, pero sí esa que es letal para 'matar' al rival (una vez más, gracias a un Messi que está en un nivel muy superior). En la primera mitad, el duelo estuvo en la pizarra y ambos equipos dejaron una sensación de temor o miedo, sin apenas acercamientos o para incomodar al rival. 

De hecho, la primera jugada de peligro real fue la del gol de Nahuel Molina con la que Argentina abrió el marcador y, en principio, no tenía nada de peligro. Y es que en el 35', el del París Saint-Germain no tuvo ningún problema para marcharse de su marcador con el cuerpo, ganó un metro de distancia en la marca sin tocar el balón para inventarse un pase sensacional, casi sin mirar, que recibió el lateral del Atlético. 

Molina controló y definió con el exterior de la bota derecha para mandarla al palo largo y levantar a todos de sus asientos. Fue el despertar de una albiceleste que, si bien no estaba siendo brillante, supo cómo aprovechar su oportunidad más clara contra una 'Oranje' muy bien plantada, pero sin lucidez a la hora de sumarse al ataque. 

De 'La Pulga' nacieron todas las acciones peligrosas del partido, incluso en la segunda mitad. El del PSG supo cómo romper todas las líneas de los neerlandeses y en el 59' consiguió habilitar a Mac Allister, que buscó a Rodrigo de Paúl, pero su pase se quedó en nada. Diez minutos después Messi tuvo su oportunidad personal con una falta directa, pero el balón se marchó fuera 'lamiendo' el larguero de Noppert. 

De la tranquilidad al sufrimiento

Entre la gran solidez de Argentina y su buen juego sin balón, con una concentración máxima, el plan inicial de Louis van Gaal de esperar y reaccionar fue desgastándose de a poco porque, si bien controlaron mucho más el balón, los acercamientos al área del 'Dibu' Martínez llegaban a cuentagotas, sobre todo después que en el 72' Leo Messi 'rompiera' el partido desde el punto penalti. 

El '10' se aprovechó de una falta clara de Dumfries sobre Acuña dentro del área para enfrentarse cara a cara contra Noppert y vencerle. Se acercó al esférico para mandar su disparo a la izquierda mientras el guardameta se quedaba estático bajo los tres palos. Fue el aparente 'final' de un partido que la 'albiceleste' ganó por la vía rápida, pero no contaban con el despertar de los Países Bajos. 

Y es que, cuando el partido parecía totalmente cerrado, los de Louis van Gaal sembraron el miedo a los argentinos: Berguis mandó un centro al área y Weghorst, con un gran giro de cuello, mandó el balón lejos del alcance del 'Dibu' Martínez. Pudieron firmar el empate un minuto después con un remate de Berguis de volea, pero acabó siendo muy desviado y golpeó el lateral de la red, pero como el que no sabe qué es rendirse, siguieron detrás del empate, que consiguieron de manera milagrosa en la última jugada del encuentro, para forzar la prórroga con una jugada directamente sacada de la libreta de Van Gaal: Una falta directa acabó con un pase interior que recibió Weghorst para revolverse y cruzar el balón, que se coló en la portería para el 2-2.