España ya tiene asegurada su clasificación para los octavos de final de la Eurocopa tras una auténtica exhibición frente a Italia en la segunda jornada de la fase de grupos. Se quedaron muy cortos en el marcador, porque pudieron anotar un par de goles más, pero dejaron una actuación inmejorable que les convierte, por sensaciones, en una de las grandes candidatas a llevarse el título. Luis de la Fuente ha dado con la 'tecla'.
La superioridad de España sobre Italia no tardó en ser notoria, desde la tenencia del balón y las ocasiones. Luis de la Fuente 'juntó' a sus interiores para que estuviesen mucho más cerca de los extremos y, a partir de allí, hundir a Italia con una presión incesante y negándoles la oportunidad de encontrar comodidad en el centro del campo para conectar con sus atacantes. Solo Gianluigi Donnarumma pudo vestirse de 'héroe' para frenar a los españoles durante un primer tiempo que fue digno de monólogo... Sin premio.
Superioridad absoluta de España en el Veltins Arena
El rol de futbolistas como Nico Williams y Lamine Yamal en esta selección es impecable y explica, de cierto modo, el desequilibrio que puede generar 'La Roja' en zona de ataque. Son los más jóvenes, pero también los más listos y quienes no se 'esconden'. El jugador del Athletic Club generó caos constantemente por la banda izquierda y condenó a un Giovani Di Lorenzo que no le pudo controlar. Lo mismo hizo el jugador de 16 años ante Dimarco. No dieron concesiones y revolucionaron el partido, aunque les terminaron 'tapando' sus ocasiones.
Las oportunidades de España de abrir el marcador llegaron desde el pitazo inicial. El menor de los Williams se fue por la banda, llegó a línea de fondo y puso un gran centro para que lo cabeceara Pedri, pero apareció el guardameta del Paris Saint-Germain para denegarle el gol. Nico volvió a insistir tras un contragolpe iniciado por el '20' y que acabó con un cabezazo que no pudo encontrar portería. Morata y Fabián probaron suerte, pero Donnarumma apareció como 'ángel' para los italianos.
Los atacantes se llevaron los 'elogios', pero los hilos del partido los estaba llevando un Rodri que fue infalible desde el pase y que dio la consistencia que tanto necesitaba España, en ambas facetas del juego. Se le sumó un Cucurella muy activo por la banda y que se destacó en funciones defensivas, aunque no es su fuerte. No dejaron transitar a una Italia que solo pudo 'respirar' con un disparo de Federico Chiesa que se marchó muy alto.
Sin cambios en la segunda mitad.. y gol con fortuna
Fue un recital que tuvo continuidad en la reanudación porque, pese a los cambios de Spalletti, la 'azzurri' no supo cómo reaccionar y España avisó, con una ocasión de Pedri 'libre' en el corazón del área pero con un remate desviado, antes de que Calafiori les 'regalara' el gol que abrió el marcador antes de la hora de partido. Llegó gracias a una gran acción de Nico Williams, incesante, por la banda que acabó con un centro a media altura. Rozó en Morata y golpeó en el defensor del Bologna antes de colarse en la portería.
Lejos de reaccionar, Italia se metió atrás y las ocasiones para 'La Roja' no faltaron: Morata con un remate lejano que repelió Donnarumma y un cabezazo de Le Normand que sacó Cambiaso bajo palos. Lamine Yamal fue el siguiente con un golpeo desde el pico del área que pasó cerca del palo del guardameta. Williams fue el siguiente, con un potente disparo que acabó estrellándose en el larguero. La única respuesta de Italia fue un centro raso que no pudo llegar a conectar Retegui. Fueron los últimos 'latidos' de un partido que bajó el ritmo y en el que Italia nunca se creyó la posibilidad de empatar, pese al 'bajón' tras los cambios de España.