38 partidos después, el Barcelona perdió el invicto local en la Champions

La estrepitosa derrota que sufrió el FC Barcelona este martes en manos de la Juventus, por 0-3, no solo significó un daño más a un ya bastante golpeado cuadro culé, o la pérdida de la primera plaza del grupo en el que ambos equipos habían sido juntados. También valió para ser el partido en el que se rompió la racha de 38 partidos que tenía el equipo blaugrana sin perder en el Camp Nou, por la Champions League.

El último encuentro que los actualmente dirigidos por Ronald Koeman habían perdido en condición de local había sido en el año 2013, cuando la locomotora del Bayern Múnich endosó un lapidario 0-3 en la vuelta de las semifinales del certamen internacional de la temporada 2012-13. Dicho emparejamiento culminó con un global de 7-0 y fue uno de los resultados más escandalosos que el equipo culé recibió en la pasada década. 

Unos meses después, con Gerardo "El Tata" Martino en el banquillo del Barcelona, comenzó la buena racha del equipo jugando como local, al golear por 4-0 al Ajax de Ámsterdam. Esa misma temporada, el club consiguió otros resultados notables, como el 3-1 al Milán, el 6-1 al Celtic de Glasgow o el 3-1 al Manchester City, pero finalmente cayó eliminado frente al Atlético de Madrid, que terminó siendo subcampeón de esa edición de la Champions. 

Balance de la racha del Barcelona

Siete años con un factor de imbatibilidad jugando como local hicieron que el Camp Nou fuese un verdadero fortín para el FC Barcelona. Mientras jugaba en Cataluña, el equipo azulgrana consiguió ganar el partido de turno en 34 oportunidades y empatarlo cuatro veces, con 112 goles a favor y tan solo 20 en contra.

La pérdida de esta condición es tan dolorosa como reflexiva, ya que deja bastantes moralejas para la que está siendo la actual temporada e invita a los jugadores y al cuerpo técnico a remplantearse muchas cosas, de cara a lo que será el resto de la temporada. De seguir jugando como se jugó ante la Juventus, puede que no sea la única racha que se pierda y se espera que, tanto los futbolistas del plantel como los integrantes de la dirección técnica, estén al tanto de todo lo que está en riesgo.