ANDRÉ GOMES, EN EL PUNTO DE MIRA
A la afición del Barça se le acaba la paciencia con André Gomes
Publicación:4/12/2016 - 17:35h
Actualización:4/12/2016 - 17:40h
Pese a encadenar varias titularidades consecutivas en partidos de Champions y Liga Santander, André Gomes no termina de adaptarse al juego azulgrana y a un sector de la afición barcelonista se le empieza a acabar la paciencia con el portugués
En algún que otro sector de la afición del FC Barcelona existiría cierto cansancio, e incluso hartazgo, con el rendimiento que está aportando André Gomes desde que aterrizó en el Barça, sin ofrecer de momento el juego explosivo y dinámico en el centro del campo que presagiaba.
El FC Barcelona pagó 35 millones de euros fijos por sus servicios más 20 "kilos" en concepto de variables, sin contar otros 15 millones en el caso de que el portugués gane algún día el Balón de Oro. La cuestión es que, al menos por el momento, André Gomes no ha justificado el pago de semejante cantidad de dinero, siendo un fichaje que en su día algunos ya criticaron al tratarse de una incorporación no prioritaria.
Desde "FCBN" damos nuestro más sincero apoyo a André Gomes, teniendo la confianza de que pronto podrá explotar sus potencialidades en un club que, en base a la teoría, le viene como anillo al dedo. Las oportunidades que le ha concedido Luis Enrique con varias titularidades consecutivas en Liga y Champions League, sin embargo, de momento no han servido para que el luso mejore en la sala de máquinas culé.
Le falta adaptación, asimilación de conceptos y, sobre todo, soltarse y perder los nervios, algo que provoca imprecisiones en sus líneas de pase y precipitación en la toma de decisiones. Se espera que André Gomes se convierta a largo plazo en un jugador fundamental para el Barça cuando se relaje y deje de tener la tensión actual.
Hasta que eso no suceda, deberá seguir trabajando al máximo en los entrenamientos para contar con más oportunidades. A sus 22 años se le antoja un gran futuro por delante, siempre y cuando tire de personalidad y carácter para cambiar los tímidos silbidos que se escucharon en el Camp Nou este pasado sábado por aplausos de admiración. El tiempo dirá si consigue hacerlo.