A medida que se acerca la hora de la verdad van conociéndose detalles de cuál es la idea futbolística de Valverde -la presión alta como concepto inamovible parece claro-, así de qué jugadores no cuentan demasiado para el técnico extremeño. El más señalado, Arda Turan. El turco fue suplente ante el Nàstic y en el Gamper no jugó ni un sólo minuto.
Un detalle que pasó desapercibido pero que es bastante significativo, porque Valverde sí dio entrada a Samper o Aleñá. Turan se quedó los 90 minutos en el banquillo. El único que no salió junto a Douglas. Hasta Munir disputó un cuarto de hora. ¿Se ha quedado sin hueco Arda en el Barça?
Parece claro que sí. Ni la salida de Neymar ha hecho cambiar de opinión a Valverde. La desgana y la apatía que transmite Turan son inaceptables. El ex del Atlético de Madrid no lucha por minutos, y tampoco se le ve preocupado. De nada sirve que hace dos días pusiera en Twitter una foto con un escueto mensaje: "Seguimos trabajando".
Con la voluntad de los jóvenes y la polivalencia de Sergi Roberto, Turan tiene las horas contadas en el club catalán. De confirmarse su salida, sería uno de los fichajes más fatídicos de la historia del Barça, sobre todo por lo que pagó el Barça por él al Atlético -cerca de 40 millones de euros-.
Se le busca salida
El Barça lleva todo el verano buscando salida a Turan, pero el interés de algunos clubes -sobre todo de Turquía e Inglaterra- no se ha traducido en ofertas en firme. El club azulgrana cree que el caché del turco es alto y debe intentar sacar alrededor de 30 millones por él. No obstante, no se descarta que pueda quedarse hasta el mercado de invierno.