Yusuf Demir fue una de las grandes novedades que introdujo el entrenador neerlandés del conjunto azulgrana, Ronald Koeman, en el primer once de la pretemporada, en el amistoso contra el Gimnàstic de Tarragona. El austríaco, flamante fichaje del FC Barcelona B, partió desde el costado derecho con muchísima movilidad y dejó varios detalles interesantes. Aunque no marcó, fue de lo mejor del conjunto barcelonista en la primera mitad, en ese encuentro que se definió por goleada en la segunda parte gracias al 'hat-trick' de Rey Manaj y otro tanto de Álex Collado para el 4-0 a favor de los culés.
Ha llegado procedente del Rapid de Viena para jugar en el Barça B, pero es consciente de que Koeman no duda en apostar por los jóvenes. Una de sus principales armas para seducir al técnico es: la madurez. Prueba de ello, como bien apunta el periodista Juan Manuel Díaz, es que ya está en dinámica con el combinado absoluto austríaco (cinco minutos en la recta final del 3-1 ante las Islas Feroe del pasado 28 de marzo).
Otra de sus cualidades son los duelos uno contra uno, ya sea por las bandas o como media punta. Además, siempre tuvo claro que quería vestir la azulgrana a como diera lugar. "Solo quiero jugar en el Barça", fueron incluso las palabras del joven futbolista a los dirigentes del Rapid de Viena, quienes también tenían muy en cuenta que el jugador debía ser vendido sí o sí. Con ellos, Demir facturó en la campaña 2020-21 un total de nueve goles y aportó tres asistencias en 32 partidos, en 1.051 minutos sobre el césped.
Con tales registros y su desparpajo ante el Nàstic y el Girona, Demir, quien ha sorprendido al cuerpo técnico y al resto de los jugadores a sus 18 años cumplidos el 2 de junio, empezará en el Barça B. Al igual que muchos juveniles, sabe que tiene en Koeman la gran oportunidad de entrar en dinámica del primer equipo, donde ya varios canteranos son protagonistas de la reconstrucción que se impulsa desde las oficinas del Camp Nou.
Conocer a Messi
Conocer personalmente al astro argentino Leo Messi es uno de sus sueños, pero no más que poder lograr jugar a su lado. Es por ello, que las ilusiones del chaval se ven plasmadas en el campo, puesto que de sus piernas nacieron algunas de las jugadas más atractivas e ilusionantes durante los dos primeros partidos de pretemporada de los azulgranas. Ahora, solo le queda establecerse en el filial y terminar de demostrar que más temprano que tarde está para saltar al campo del mítico Camp Nou.