El FC Barcelona ha conseguido 'atar' a dos de los jugadores llamados a ser claves en este próximo proyecto. Ansu Fati y Pedri ya han firmado sus nuevos contratos y seguirán en el Camp Nou para liderar al Barça a corto, medio y largo plazo. Por lo tanto, con la continuidad de ambos cerrada, el club debe hacer frente las renovaciones de Ousmane Dembélé, Ronald Araújo y Gavi, que son ahora mismo las más urgentes que hay que hacer.
La del francés es sin duda la más preocupante, ya que acaba en 2022 y desde el 1 de enero podrá negociar su futuro libremente con cualquier equipo para marcharse gratis en verano. La entidad lleva tiempo hablando con su representante, pero parece que al entorno del galo no le hace gracia tener que bajarse el sueldo. El agente del de Vernon sabe que si finaliza contrato tendrá ofertas muy superiores y está tensando la cuerda en busca de un trato mejor.
Sin embargo, el club tiene claro que no cederá a ningún chantaje y que no cambiará su propuesta. Por ello, según 'Mundo Deportivo', le habrían indicado al representante del internacional 'bleu' que quieren una respuesta este mismo mes. En caso de no llegar, desde el Barcelona se plantean incluso mandarle a la grada. Sea como sea, si no hay trato pronto, se empezará a trabajar en un sustituto para el curso que viene.
Por otro lado está Araújo, que acaba contrato en 2023 y que quiere seguir en el Barça. El uruguayo, ahora lesionado, se ha convertido en el líder de la defensa barcelonista y es sin duda el mejor central que hay en la plantilla pese a sus 22 años. Llegar a 2022, un año antes de finalizar contrato, es un peligro que la directiva culé quiere evitar. El defensor es feliz y está abierto a renovar, algo que deja a la entidad tranquila. Todavía no han hablado con Excellence Sport, su agencia de representación, pero lo hará más pronto que tarde para iniciar la negociación.
Gavi es otra de las carpetas que tiene que solucionar el Barcelona en los próximos meses. El canterano, que ha irrumpido en el primer equipo para quedarse, acaba en 2023 y en el club esperan blindarle pronto. Su cláusula es de solo 50 millones de euros y los azulgrana desean subírsela hasta los 500, igual que con Nico González y Alejandro Balde este verano pasado. El centrocampista quiere triunfar en la Ciudad Condal y todo apunta que el trato será sencillo.
Sergi Roberto, un caso diferente al de los demás
Por último, cabe recordar también que Sergi Roberto termina contrato en 2022. En su caso, no obstante, el Barça no tiene prisa, ya que parece que podría no haber interés en que siga en el equipo. Las negociaciones con su agente están paradas y está por ver que se vayan a retomar. En los próximos meses se verá si la entidad decide dejar que se vaya gratis o le da otra oportunidad.