Antes y ya una vez iniciado el parón de selecciones, el FC Barcelona ha afrontado nuevamente las consecuencias del 'virus FIFA', viendo caer lesionados a varios de sus jugadores en un mismo período. A finales de enero, una de las 'víctimas' había sido Ousmane Dembélé, en tanto que las lesiones posteriores de otros miembros de la plantilla provocaron modificaciones en el plan.
A diferencia que en el caso de Pedri González, quien ha venido evolucionando con miras a una nueva edición del Clásico, el francés no ha dado señales de evolución tras la lesión sufrida en el partido ante el Girona, lo que le llevó a perderse varias citas claves de la temporada, incluyendo la amarga eliminación europea a manos del Manchester United.
La estrategia con Dembélé
En tal sentido, la entidad catalana ya tendría definida una serie de pasos para que el francés pueda volver a su plena forma física. Su progresiva reincorporación a la actividad ya no dependerá de plazos fijos marcados por los servicios médicos, sino que será producto de un seguimiento constante en busca de señales de recuperación.
Tanto el galo como el internacional con la selección española tienen ansias de estar nuevamente en el campo, pero desde el cuerpo técnico apuestan por la prudencia, evitando así alguna recaída durante el proceso de recuperación. Dembélé venía de 14 semanas sin caer a causa de una lesión y ya está cerca de la que en teoría será su fecha de regreso.
El Barça no le forzará
Sin embargo, a pesar de ser una pieza vital para el ataque del equipo de Xavi Hernández, no habrá procedimientos especiales para acelerar su puesta a punto. Todo dependerá de sus sensaciones y las que pueda tener el cuerpo médico. Solo así será posible tenerle de vuelta, al tiempo que el club trabaja ya en su renovación.