Los cambios empeoraron a un Barça que estaba dominando el Clásico

El FC Barcelona terminó perdiendo ante el Real Madrid (1-2) un partido que, en la previa, parecía que podría haber tenido en la bolsa después de una primera mitad impecable, donde con el gol de Ilkay Gündogan al minuto seis, parecía ser el presagio de una noche memorable. Las ocasiones arreciaron hacia el arco del combinado merengue, que, dicho sea de paso, se mostró sumamente estéril en la primera mitad, sin una llegada de peligro y con un Ter Stegen como espectador VIP.

Sin embargo, para la segunda mitad, las acciones cambiaron de parte y parte. El primero en tocar la plantilla fue Carlo Ancelotti, que, viendo cómo transcurría el duelo, decidió echar mano de Eduardo Camavinga para renovar un costado izquierdo en el que se mostró poco y nada con Ferland Mendy. Desde la entrada del galo, al elenco blanco se le vio otra cara.

Lewandowski, la primera variante que no le respondió a Xavi

La respuesta de Xavi Hernández, por su parte, llegó al 61’. El de Terrassa decidió, en aras de terminar de liquidar un encuentro que se veía asequible, darle ingreso a un recientemente recuperado Robert Lewandowski por un Ferran Torres que, si bien estuvo 'luchón' en el frente de ataque, no había podido ser agente de peligro en campo rival.

Acertada, en el papel, la inclusión del polaco y su fuelle goleador, aunque en realidad, si bien fue un cambio lógico para no dejar al máximo goleador en el banquillo, la jugada no salió del todo bien. El ex del Bayern Múnich no se mostró mal a nivel físico, pero le faltó ser influyente en el juego, pasando unos 29 minutos sin tirar al arco y mostrándose más incómodo en el frente de ataque de lo habitual.

Luka Modrić, cambio clave en el Real Madrid

En la acera de enfrente, también se fraguó otro cambio, pues al 63’ Ancelotti le dio ingreso a Luka Modrić por Toni Kroos, un cambio que representó el envalentonamiento final de los merengues. En la zona medular blanca, además de piernas frescas, hacía falta alguien con una mayor capacidad de retención de balón y de gestionar las jugadas de manera efectiva, algo que el croata se tomó a pecho y ejecutó notoriamente. Igualmente, cabe destacar que los blancos le dieron ingreso a un Joselu más habituado a las labores de centro delantero que Rodrygo, quien no tuvo el encuentro más lúcido.

Oriol Romeu, el cambio 'lapidario' para el juego del Barça

Posterior al cambio de imagen de los blancos, derivado por las variantes y por el 'sablazo' que sacó Jude Bellingham desde fuera del área y que hizo inefectiva la volada monumental de Marc André Ter Stegen, poniendo el 1-0 en el marcador. El técnico de Terrassa realizó una nueva variante en búsqueda de oxigenar el mediocampo y darle una mano a un Gavi que estaba ejerciendo bien como la sombra del inglés, hasta que en un pequeño descuido, el ex del Borussia Dortmund se hizo valer en el encuentro.

Al 72', Oriol Romeu hizo su ingreso por el nativo del Campillo, pero la realidad es que este cambio tampoco, aunque lógico, le ha respondido del todo bien a Xavi. Ha sido una variante que, a la par de restarle fuelle ofensivo al Barça, le ha quitado solidez en la zona medular, pues el nativo de Ulldecona no ha podido ser un agente efectivo a la hora de presionar y mucho menos a la hora de recuperar la esférica, restándole mucho al elenco azulgrana en salida desde el fondo.

Lamine y Raphinha, modificaciones que aportaron poco y nada en ofensiva

Ya al 77’, el técnico egarense, en aras de terminar de buscar el tanto que le rompiera la paridad, renovó sus alas, dándole ingreso a Lamine Yamal y Raphinha por João Cancelo y João Félix, otra modificación que, por otro lado, no ha tenido la efectividad deseada, influida también por su puesto, por el hecho de la poca generación de juego en materia ofensiva del conjunto culé.

Además, este cambio se puede decir que tuvo una gran cantidad de aristas, pues si bien el brasileño es una de las variantes ofensivas valorables en el banquillo y apuró físicamente para estar, su inclusión ha hecho que Lamine Yamal tenga que jugar por línea izquierda, cuando el espluguense es más una amenaza por el costado diestro. Si a esto se suma que el brasileño viene con poco rodaje de competición y el cambio ha hecho que, entre otras cosas, tenga que salir un João Félix que estaba jugando a buen nivel con un par de detalles técnicos en el partido, coronan una serie de cambios que, en el papel, lucían buenos, pero que al final del encuentro han terminado siendo no tan acertados.