Gerard Deulofeu pasa uno de los momentos más complicados desde que regresó al FC Barcelona el pasado verano. El extremo de Riudarenes no consigue arrancar con un buen rendimiento ni ser determinante en los partidos que disputa pese a contar con oportunidades otorgadas por Ernesto Valverde y, ante el Celta de Vigo, no jugará por decisión técnica.
Gerard Deulofeu regresó en verano al FC Barcelona después de que el club azulgrana hiciese efectiva la cláusula de recompra del delantero catalán por 12 millones de euros. En el Milan tuvo un rendimiento extraordinario, hecho que le convirtió en un fichaje ilusionante para la presente temporada, y más todavía después de la fuga de Neymar al Paris Saint-Germain.
Al inicio de LaLiga, Ousmane Dembélé sufrió una lesión muscular de gravedad que le dejaría fuera de los terrenos de juego durante meses. Algo que, pese a ser una mala noticia para el equipo, abría las puertas de par en par a Gerard Deulofeu para hacerse un hueco en el once titular.
Sin embargo, el rendimiento de Gerard Deulofeu no ha sido el esperado. El extremo de Riudarenes no ha conseguido afianzarse como un hombre importante por su falta de gol y de acierto en la toma de decisiones sobre el campo. Después de actuaciones muy discretas, Valverde decidió dejarle fuera de la lista de convocados.
Futuro incierto
La vuelta de Ousmane Dembélé, la explosión de Paco Alcácer y el posible fichaje de Coutinho en enero todavía le cierran más las puertas a Deulofeu. Demasiada competencia para un jugador que, pese a que se le ha dado continuidad, no ha logrado ganarse al barcelonismo con su juego.