Gerard Deulofeu firmó una primera mitad prácticamente inmejorable. Una asistencia de gol y mucha participación tanto en ataque -el primer gol es casi suyo- como en defensa. Si al extremo de Riudarenes se le reprochó en la Supercopa su falta de descaro e inmovilismo, ante el Betis estuvo proactivo.
Lo que se le debe pedir a 'Deulo', vaya. Porque sin Neymar, Messi necesita un hombre con el que combinar y que también ayude atrás. Deulofeu hizo todo lo que le pide Valverde, y en apenas cinco minutos cambió el desarrollo del encuentro.
En el minuto 36, Messi entró por el centro, abrió para Deulofeu y el catalán puso un centro para Messi que Tosca desvió lo suficiente para que Adán no pudiera hacer nada. En la repetición se apreció cómo el argentino no la había tocado... así que veremos si cuenta como asistencia o es gol en propia.
Tres minutos después, en el 39, recuperó Deulofeu muy arriba con mucha picardía y sólo tuvo que dejarla al punto de penalti para que Sergi Roberto, entrando de segunda línea, engañara a Adán picando la bola. Es el primer gol del centrocampista desde aquel que le marcara al PSG en Champions.
Deulofeu se entiende con Messi
Mientras que con Alcácer sigue costando la asociación, es evidente que Messi y Deulofeu se entienden. Ambos imprimen velocidad al juego y el extremo permite dar amplitud al campo, algo que deja más espacios al argentino, que ha actuado como referencia en ataque con un tímido 4-2-3-1.