El 1x1 del Barcelona frente al PSG (Ida 1/8 Champions)

El FC Barcelona cuajó el peor partido de la temporada contra el PSG este martes en el Parque de Los Príncipes, tirando prácticamente por la boda todas las opciones de estar en la ronda de cuartos de final de la Champions League. El equipo no funcionó como bloque, y daba la sensación de que los jugadores culés corrían a cámara lenta en comparación con los de Unai Emery.

El FC Barcelona jamás estuvo seguro de lo que hacía con el balón en los pies, y por supuesto tampoco sin él. El PSG no dejó casi durante todo el partido de presionar la salida de balón del Barça, generando un gran peligro con sus contragolpes, robos de balón y lanzamientos desde fuera del área. El repaso futbolístico de los parisinos al Barcelona, en líneas generales, fue absoluto:

ONCE TITULAR

Ter Stegen: Asediado

El guardameta alemán no pudo hacer nada a la hora de evitar los cuatro goles que encajó. Bastante hizo con un paradón en la primera mitad a disparo de Matuidi, y algunas salidas en las que estuvo muy atento para evitar más goles en contra.

Sergi Roberto: Invisible

El de Reus fue superado en casi todas las ocasiones en que Draxler y Di María -que iban cambiando de banda- y Matuidi le encararon. Por desgracia, parece que en estas últimas semanas la fatiga está pudiendo con el canterano.

Gerard Piqué: Ralentizado

Gerard Piqué, al igual que su compañero en la zaga Samuel Umtiti, llegó tarde a tapar espacios y permitió que los atacantes del Paris Saint-Germain se adentraran muy rápidamente en el área de Ter Stegen. No le ayudó el centro del campo culé.

Samuel Umtiti: Irreconocible

Fue probablemente el peor partido de Umtiti desde que viste la camiseta del FC Barcelona. El zaguero galo fue superado con relativa facilidad y llegó tarde en determinadas jugadas, sin ser tampoco el muro que suele ser en el juego aéreo.

Jordi Alba: Desconcentrado

El de L'Hospitalet perdió balones en las combinaciones con sus compañeros que generaron varios sustos al FC Barcelona. No estuvo tampoco concentrado en el balance defensivo, y se le vio fatigado pese a descansar contra el Alavés.

Busquets: Superado

El de Badía, que suele contener los intentos de contragolpe rivales, esta vez nada pudo hacer ante la intensidad y acumulación de hombres al contragolpe del Paris Saint-Germain. Faltó ver al Busquets de casi siempre en París.

André Gomes: Señalado

Su horrible partido contra el PSG ha sido la gota que colma el vaso para muchos aficionados, que no ven en él a un jugador para el Barça. Perdió balones, llegó tarde a todas partes y no aportó nada en ataque ni en defensa.

Andrés Iniesta: Terrenal

La magia del capitán del FC Barcelona esta vez no salió a relucir, contagiándose el manchego de la falta de intensidad del resto de sus compañeros. Llegó casi siempre tarde al balance defensivo del Barça, puede que mermado aún físicamente.

Neymar Jr: Dolorido

El brasileño se dolió del tobillo durante varios minutos en la primera mitad y después prácticamente no pudo hacer nada de provecho contra el PSG. No desequilibró al tener siempre a dos hombres encima, y tampoco conectó con sus compañeros.

Leo Messi: Desconectado

Leo Messi cuajó su peor partido esta temporada. Apenas pudo aparecer en el juego azulgrana y, cuando lo hizo, no encontró líneas de pase con unos compañeros demasiado inmóviles. Cuando intentó jugársela, la perdió.

Luis Suárez: Seco

El delantero uruguayo apenas recibió balones cerca del área rival y tuvo que buscarse la vida como pudo, presionando pero sin poder desequilibrar ni tampoco disparar hacia la portería de Kevin Trapp.

SALIENDO DESDE EL BANQUILLO

Rafinha: Translúcido

El centrocampista brasileño no fue una solución al mal juego del FC Barcelona. Se contagió rápidamente del resto de sus compañeros y, aunque luchó por balones divididos, no pudo crear juego ofensivo ni contener el vendaval galo.

Rakitic: Necesario

El centrocampista croata tiró de orgullo cuando salió en los últimos minutos. Luchó por cada balón y logró dotar de algo de combinación al FC Barcelona, aunque no fue suficiente y todo el daño ya estaba hecho.