La planificación del FC Barcelona estaba muy adelantada antes de arrancar el verano, pero con la apertura del mercado de fichajes ha acabado sufriendo algunos cambios. Los azulgrana han tenido que modificar su hoja de ruta para adaptarse a algunas situaciones inesperadas, y además han liquidado algunas decisiones pendientes con la vuelta de los cedidos a la Ciudad Condal.
Las últimas informaciones apuntan a que, finalmente, la intención es hacer caja con Paco Alcácer y ofrecer la renovación a Munir El Haddadi, que recuperaría la plaza como cuarto delantero a la espera de cerrar todos los movimientos en el periodo estival. Esto, de momento, está por comprobar, porque el valenciano quiere quedarse a pesar de las ofertas que se han recibido en la Ciudad Condal.
El objetivo de este ajuste sería solucionar el caso de los suplentes, que habría ganado el hispano-marroquí por ser dos años más joven y estar en una situación contractual delicada. La experiencia y la vinculación más larga del de Torrent podrían significar mayores ingresos por su venta, lo que a día de hoy habría decantado la balanza.
Munir todavía debe negociar con el Barça
Tras varias reuniones y consultas al cuerpo técnico, hay confianza en la progresión de Munir, que ha dado varios pasos adelante en el Alavés y a fin de cuentas apenas tiene 22 años, lo que le da todavía mucho recorrido y la posibilidad de explotar aún mejor sus cualidades, algo que podría arrancar con dificultades desde el banquillo del Camp Nou.
El madrileño, de todas maneras, considera que con algunas temporadas más a cuestas será capaz de superar su estreno en el primer equipo, y demostrar, pase lo que pase, que merecía una oportunidad que en su momento pasó a Alcácer. Además de cuestiones económicas, también priman las deportivas, aunque en este sentido el jugador quiere estar bien cubierto.
El punta preferiría obtener garantías de que esta no es una simple operación de renovación y venta, algo que es difícil de demostrar pero que podría solucionarse con una charla con Ernesto Valverde. Si el míster le considera útil, lo confirmará a lo largo del curso, pero si no, podría estar condenando hasta que se abra de nuevo la ventana invernal.