El Barcelona ya echó el ojo a De Jong cuando tenía 18 años

El fichaje de Frenkie de Jong ha despertado una gran ilusión en el barcelonismo, y no es para menos. Se trata de uno de los mejores centrocampistas del mundo, tan sólo tiene 22 años y ya ha demostrado personalidad, talento y jerarquía en partidos del más alto nivel competitivo, tanto a nivel de clubes como con la selección de Holanda.

El Barça le contrató oficialmente en el mercado de fichajes de invierno de este 2019, pero la operación llevaba mucho tiempo trabajándose. Tanto que, ya en el juvenil del Ajax, Frenkie de Jong dejó muy buenas impresiones ante la mirada de ojeadores como Pep Boada y Miki Albert. Pep Serer, asignado por el FC Barcelona para ojear el mercado holandés, se enamoró futbolísticamente de él y así se lo comunicó a Robert Fernández, el entonces director deportivo del Barça la pasada temporada 2017-18, que fue cuando se empezó a trabajar en serio para ficharle.

Sin embargo, en los despachos de la Ciutat Esportiva de Sant Joan Despí ya había ya muchos informes del talento del Ajax desde dos años antes, cuando despuntó con la selección de Holanda Sub-19. Boada y Miki Albert dejaron constancia de sus actuaciones, y garantizaron a los altos estamentos del club que estaban ante una estrella en potencia.

Frenkie de Jong ya destacaba a sus 18 años por la polivalencia, pudiendo jugar en cualquier posición del centro del campo, aunque siempre se ha desenvuelto mejor en el interior derecho. Su elegancia y calidad técnica son sus grandes cualidades, además de la capacidad de recorrer muchos kilómetros con el balón controlado y romper líneas con su visión de juego.

Cuando irrumpió en el primer equipo del Ajax y empezó a acumular grandes actuaciones, fue cuando desde el FC Barcelona se apostó definitivamente por ir a por su fichaje, antes de que lo hicieran otros grandes clubes. A punto estuvo el Barça de perderle, debido a la insistencia de equipos como Manchester City y Paris Saint-Germain.

De Jong y su entorno, grandes seguidores del Barça

El Barça contó con la suerte, sin embargo, de que tanto De Jong como su entorno son grandes admiradores del fútbol practicado por el FC Barcelona, y tienen muy presente el recuerdo de un Johan Cruyff a quien consideran el mejor jugador holandés de la historia. De Jong quería seguir sus pasos, y también jugar al lado de Leo Messi. Sueño cumplido.