Es evidente que el clima que vive a día de hoy el FC Barcelona no es el mejor. Ni deportiva ni institucionalmente. Anoche, tras una dolorosa derrota en la ida de la Supercopa de España por 1-3 ante el eterno rival, el mánager deportivo del área de fútbol Pep Segura mandó un mensaje un tanto desafortunado a la hora de analizar el choque.

Segura dejó entrever que la culpa había sido de Piqué. "El partido ha sido condicionado por el gol del Madrid, el error de Gerard ha sido determinante. Nosotros hemos controlado la primera parte pero ese gol ha cambiado el partido", afirmó el dirigente, en medio del conflicto institucional que presenta el equipo blaugrana.

Se trata, sin duda, de un dardo envenenado hacia Piqué, que el día anterior -el sábado- había mandado varias pullitas a la directiva en materia de fichajes, en aspectos relacionados con el caso Neymar... está claro que la relación actual entre la plantilla y la junta directiva no es la más adecuada para afrontar el curso con garantías.

Sobre fichajes y Paulinho

En cuanto al apartado de nuevos refuerzos, Segura aseguró que "estaría muy mal que un resultado determinara una situación deportiva. Las cosas están hechas y se irá consumando con el paso de los días. Hay una planificación deportiva y la intentaremos cumplir. Haremos oficial todo cuando esté cerrado".

Finalmente, tuvo unas palabras sobre la inminente incorporación del brasileño Paulinho: "Cuando esté del todo hecho, confirmaremos y comunicaremos la decisión tomada, pero aún no se puede decir nada de Paulinho ni de otro jugador", concluyó, a pesar de que Scolari lo confirmó en rueda de prensa y Rivaldo escribió un mensaje de bienvenida en Instagram.