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Ernesto Valverde en un partido del FC Barcelona

EN RIAZOR DOMINÓ EL 'FAIR PLAY'

El gesto más humano de Ernesto Valverde tras el Deportivo-Barça

Publicación:30/04/2018 - 17:11h

Actualización:30/04/2018 - 18:06h

Lo que para unos eran alegrías, para otros fueron decepciones, y es que el triunfo del FC Barcelona que le daba LaLiga en Riazor coincidió con el descenso del Deportivo de la Coruña. Ernesto Valverde quiso dar un paso al frente y responder al 'Fair Play' de los gallegos

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Aunque es cierto que en el césped hay que competir al máximo, eso no es obstáculo para que el fútbol sea un deporte muy humano, y eso lo demostraron este domingo FC Barcelona y Deportivo de la Coruña. En Riazor no sólo se confirmaba matemáticamente el título de los catalanes, sino que también lo hizo el descenso de los gallegos.

La fiesta azulgrana coincidió con un entierro blanquiazul, pero eso no fue impedimento para que al campeón se le le mantuvieran unos honores que ya se habían anunciado. Hubo pasillo por la Copa del Rey, pero además, Andrés Iniesta recogió el cariño de la grada, con varias ovaciones multitudinarias desde que salió a calentar.

El de Fuentealbilla no participó de inicio por unas molestias que anunciaron desde el cuerpo técnico, pero cuando le tocó saltar al terreno de juego se demostró que es una referencia mundial tanto a nivel personal como deportivo. Han sido muchas las muestras de apoyo desde que confirmó que se marcha del Camp Nou, pero está claro que no serán las últimas.

Quien también quiso devolver una parte de ese respeto fue Ernesto Valverde, que se marcó una prioridad tras el pitido final. El Txingurri esperó cerca del túnel de vestuarios a todos y cada uno de sus rivales, para despedirse y consolarles en la medida de lo posible. Un gesto que demuestra que al extremeño también le gusta mirar más allá del balón.

El respeto cundió en el Deportivo de la Coruña-FC Barcelona

A pesar de que algunos han criticado que los futbolistas azulgrana celebraran en el mismo césped de Riazor, lo cierto es que ellos también tuvieron algunos gestos alentadores con los jugadores del Deportivo, lógicamente abatidos tras semanas de lucha para evitar un destino que se acercaba sin remedio.

Está claro que la que se vivió fue una situación complicada por el contraste de sentimientos, pero dentro de un marco muy habitual en las últimas jornadas de LaLiga. Al Barça le toca ahora luchar por superarse la temporada que viene, en la que el Dépor volverá a batallar para recuperar el lugar que merece entre los grandes.