Hace sólo dos partidos que arrancó su andadura con el FC Barcelona, pero encajar a Philippe Coutinho es una tarea subrayada en rojo en la libreta de Ernesto Valverde. La naturalidad y el desparpajo que el brasileño exhibió en su estreno en Copa del Rey se encorsetó con su caida a la banda derecha en LaLiga, pero el objetivo principal es encontrarle soluciones pronto. Quiere explotar su talento al máximo.
El principal problema es que el sistema del técnico ha funcionado bien con una idea clara y muy pocos ajustes y nombres distintos, por lo que una incorporación del nivel del de Río merece ser evaluada con detenimiento. Lejos de limitarse al esperado intercambio de piezas con Andrés Iniesta, el Txingurri quiere demostrar que los puede aprovechar a ambos en un mismo once, aunque su primer experimento no dió el resultado esperado.
Al contrario que Ousmane Dembélé, que sí puede adaptarse al juego por las dos bandas, el ex del Liverpool multiplica su rendimiento cuando parte desde el perfil izquierdo -e incluso-, donde tiene una mayor visión del juego y mejora su capacidad de disparo y/o desborde. Precisamente, este es el espacio por el que se mueve el manchego, algo que complica la misión de verles a los dos como titulares.
Muchas alternativas
Como Coutinho ha llegado a media temporada y no ha habido tiempo suficiente para entrenamientos o amistosos, a Valverde no le queda más remedio que limitarse al ensayo y error en los partidos en los que tenga más margen de movimiento. Tanto para su 4-4-2 predilecto como para el 4-3-3 clásico, el Txigurri tiene muchas alternativas, pero como ya ha demostrado, no quiere revolucionar sus planes sin motivo.
Con pocos ajustes por partido puede ir probando más opciones y continúa teniendo margen para corregir, algo que logró con el cambio de laterales contra el Alavés que mejoró la imagen del Barça, y que dio la posibilidad al brasileño de acercarse más a la comodidad del carril central. Así, quizá le lleve algo más de lo esperado, pero Coutinho está llamado a ser importante y el extremeño conseguirá encajarle en un sistema tan exigente como efectivo.