La estrategia del Barça para inscribir a todos sus fichajes a tiempo

El FC Barcelona ha cerrado ya seis fichajes en el mercado de verano, además de la renovación de Ousmane Dembélé, con lo cual deberá liberar al menos cinco cupos en la plantilla para poder inscribir a todos sus refuerzos antes del 31 de agosto, día del cierre de la ventana de traspasos. Al respecto, el economista Iván Cabeza considera que la directiva no tendrá problemas para incorporar a estos jugadores a tiempo en la plantilla final de LaLiga, gracias a la activación de las 'palancas' financieras.

Y es que, mediante el dinero ingresado por la venta del 25% de los derechos televisivos de LaLiga por los próximos 25 años, el Barça ha podido volver a la regla del 1x1 (un euro invertido en fichajes por cada euro liberado). Para Cabeza, es probable que la directiva ya haya ingresado la mayoría de los 519 millones de euros que el grupo inversor Sixth Street aceptó pagar por los derechos televisivos, un dinero que no solo ha servido para costear la llegada de Raphinha, Robert Lewandowski y Jules Koundé.

En una entrevista con EFE, el economista explicó que esta cantidad representa una plusvalía contable de 667M para el Barça. 100 'kilos de este monto 100 se habrían destinado a retornar una parte del préstamo de Goldman Sachs. Con ello, la directiva ha podido revertir el patrimonio neto negativo de 451 millones de euros registrado al termino de la temporada pasada y, además, no se descarta aún la venta del 49% de Barça Studios, la productora audiovisual del club.

Esto, sumado a la venta de varios jugadores en rampa de salida (Memphis Depay, Óscar Mingueza, Riqui Puig, Samuel Umitit, Neto, Martin Braithwaite e, incluso, Frenkie de Jong) hará que el club tenga vía libre para inscribir a sus fichajes, incluyendo a Pablo Torre, quien llegó a cambio de 5 millones de euros con contrato hasta 2026 y una cláusula de rescisión de 100 'kilos'.

El reto del Barça  para la 2022-23

La activación de las 'palancas' y la enorme inversión realizada hacen que el reto para los de Xavi Hernández sea mayúsculo en la 2022-23. El equipo demostró la capacidad de volver a ser competitivo entre febrero y abril de este año y, con los refuerzos, las expectativas son máximas, ya que el club cuenta ahora con una de las plantillas más completas de Europa. Eso hace que la obligación de ganar títulos sea total, más cuando se viene de tres temporadas malas.

Sin embargo, Iván Cabeza considera que el verdadero reto del club a partir de agosto "es ser sostenible, con ingresos a final de temporada siempre superiores a la masa salarial, porque así se podrá ir cubriendo la deuda (actualmente de 1.350 millones, ampliable a 1.500 por el Espai Barça  y recuperar los ingresos que no tendrás por derechos televisivos (poco más de 40M por temporada por la venta con Sixth Street)". 

"Para que salga bien no es tan importante ganar títulos como competirlos hasta el final, generando marca. Debes conseguir volver a estar allí donde estabas. Así generarás siempre muchos ingresos que te permitirán revertir los que dejarás de ingresar anualmente a causa de la venta de activos", puntualizó Cabeza. Así, el Barça tiene la misión de recuperar su estatus de equipo grande en la 2022-23. La directiva ha dado el paso inicial. Ahora, toca justificar la inversión sobre el campo.