El atletismo del FC Barcelona vivió una jornada histórica en los Juegos Olímpicos de Tokio. La atleta venezolana Yulimar Rojas se alzó con la medalla de oro del salto triple femenino. La nueva campeona batió el récord olímpico y la marca mundial en su participación, con 15.45 y 15.67, respectivamente.

Rojas fue la atleta más destacada en la final femenina del salto triple. La venezolana impuso tres marcas que ninguna de sus rivales siquiera pudo rozar. En su primer intento, la venezolana ya  batió el récord olímpico con 15.45. Siguió la competencia mientras que la crack culé seguía intentando romper su propia marca. Se acercó en el cuarto salto de seis, con 15.25, y aun así nadie se atrevió a acercarse a la misma.

Arrancó haciendo trizas la máxima olímpica, y el último no sería la excepción. Fue en el sexto salto en el que la atleta del Barça rompió el récord mundial alcanzando los 15.67 metros… ¡Histórico! El club azulgrana posee en su seno a la mejor atleta de salto triple del mundo, que tiene apenas 25 años y que no tiene competencia directa actualmente.

Patrícia Mamona fue la atleta que más cerca estuvo de las astronómica marca de Rojas, con 15.1. Es decir, la venezolana impuso tres récords, lejos de la portuguesa y de la española Ana Peleteiro, quienes se hicieron con las medallas de plata y bronce, respectivamente. Es importante resaltar que Peleteiro y Rojas son compañeras de entrenamiento, pues están bajo la dirección del medallista olímpico, el cubano Iván Pedroso.

Atletas culés

Asimismo, el gallego Adrián Ben se clasificó para la final de los 800 metros lisos y se convirtió así en el primer hombre español en competir por las medallas en dicha disciplina. Por su parte, la sevillana Carolina Robles consiguió su boleto a la final de los 3.000 obstáculos tras ser recalificada luegos de haber sido damnificada en una caída durante las semifinales.

Tras el éxito histórico conseguido por Yulimar Rojas, Adrián Ben y Carolina Robles podrían alcanzar el podio olímpico en representación del FC Barcelona. Sin duda, un éxito que el club azulgrana y el barcelonismo celebra, pues las esperanzas en un futuro de oro, plata y bronce parecen estar asegurado en el atletismo olímpico, y claro, con sello culé.