La continuidad de Joao Félix en el FC Barcelona pasa, hoy por hoy, por dos factores: lo económico y lo deportivo. En el primer caso, habrá que esperar hasta el próximo verano para ver si las cuentas le dan o no al Barça para negociar con el Atlético de Madrid. En el segundo apartado, todo depende de la capacidad del mediapunta para vencer la que, hasta ahora, ha sido una constante en su paso por España: la irregularidad.
En líneas generales, la primera mitad de temporada del de Viseo con el Barça no ha sido mala. 6 goles y 3 asistencias en 20 partidos no son, ni mucho menos, números top para un jugador de su categoría, pero considerando que el luso no jugó en todo el verano con el conjunto 'colchonero', su adaptación fue mucho más positiva de lo esperado. Sin embargo, más allá de lo estadístico (al '14' no se le pide convertir 30 goles en la temporada), la afición y el cuerpo técnico reclaman consistencia en sus actuaciones, algo que, hasta ahora, no ha conseguido.
La clave para la explosión de Joao Félix en el Barça
En ese sentido, la clave para la explosión definitiva de Joao Félix como culé pasa por mantener una regularidad dentro del campo. Hasta ahora, el jugador de 24 años ha sido selectivo con sus actuaciones estelares, brillando en los duelos en casa ante Amberes, Oporto y Atlético, pero desapareciendo en partidos contra rivales de menor jerarquía, como fue el caso del Almería.
Ese partido, el último oficial del 2023 para los de Xavi Hernández, puede ser determinante en muchos aspectos para el equipo de cara al resto de la temporada, incluyendo el futuro del internacional portugués. El técnico egarense no dudó en quitar al '14' en el entretiempo para buscar una reacción al final liderada por Sergi Roberto. Un 'toque' de atención que se confirmó en el amistoso ante el América de la semana pasada y que debe hacerle entender al jugador que, de ahora en adelante, no habrá indiscutibles en el once. Quién mejor esté será titular. Sin excusas ni miramientos.