Las últimas actuaciones de Ílkay Gündogan con el FC Barcelona han recordado más a su mejor versión en el Manchester City. Si bien ahora pisa menos el área que con el conjunto 'sky blue', el de Gelsenkirchen ha sido determinante contra Oporto y Alético para que el Barça lograse salir de la 'mini crisis' de las últimas semanas por su flojo rendimiento colectivo. En ese sentido, el mediocentro de 33 años explicó en una entrevista con el diario alemán 'Die Zeit' por qué se decidió por los culés este año.

"Después de siete años en el Manchester City con Pep Guardiola pensé que era importante volver a salir de mi zona de confort, futbolística y personalmente. Me gusta empezar de nuevo, aunque pueda ser difícil". Aunado a esto aseguró: "El Barça aún necesita mejorar muchos aspectos, por eso me ficharon. Xavi me dijo que transmitiera mi experiencia y, aunque el idioma aún es una barrera, puedo provocar ciertas cosas en mis jóvenes compañeros solo con mi comportamiento", argumentó el alemán.

Gündogan confía en la calidad de la plantila del Barça

Al respecto, el '22' azulgrana se animó a hablar sobre lo que puede depararle el futuro al Barça a mediano y largo plazo, una vez supere del todos sus problemas financieros. "El Barça confía en los jugadores de La Masia, pero también en extranjeros como yo que aportan estabilidad". De momento, el internacional alemán suma 1 gol y 5 asistencias en sus primeros 20 partidos, con dos pases de gol en Champions.

Seguidamente se refirió al impacto de las bajas que el Barça ha afrontado desde la llegada de Xavi al banquillp culé. "El club ha perdido futbolistas de la talla de Leo Messi que marcaron una época y el éxito no llega de la noche a la mañana. Es un proceso siempre en colaboración con los aficionados, por cierto", sostuvo un Ílkay que no ha tardado en ganarse el rol de indiscutible en el equipo

Los elogios hacia Pep y sus planes para el futuro

Con respecto a su pasado en el City, Gündo no dudó en elogiar a Guardiola, no sin antes mencionar que, en el futuro, le gustaría probar suerte en los banquillos. "Pep logra que 20 estrellas se pongan de acuerdo y funcionen. Convence incluso a los que no juegan para que den el cien por cien por el equipo. El entrenador es el que debe resolver las situaciones difíciles y el responsable del éxito", puntualizó el alemán. Así las cosas, Ílkay tendrá el domingo otra nueva oportunidad de demostrar su donde de mando ante el Girona.