El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, compareció ante los medios de comunicación este lunes y tras dos horas en rueda de prensa dejó clara la postura del FC Barcelona: no hay ningún delito. El máximo mandatario azulgrana inició con una declaración, en la que resumía las últimas semanas vividas por la institución, la cual ha sido constantemente atacada, aún cuando las informaciones dejaban claro cuál había sido el motivo de los pagos al exárbitro Enríquez Negreira.
"Durante los dos meses está sufriendo una tremenda campaña de desprestigio (el club). Estas informaciones y las conclusiones no tienen nada que ver con la realidad. El Barcelona ha sido un modelo de juego limpio. Estamos orgullosos de haber aportado al deporte", inició Laporta en su discurso. "El Barça ha ganado durante décadas y seguimos ganando gracias al esfuerzo, al talento de nuestros jugadores y jugadores, técnicos, trabajadores y a nuestros socios y aficionados, a los culés", quiso resaltar el presidente catalán.
No habrá problema en atacar a los que han atacado
Desde el primer momento, Laporta quiso dejar en evidencia que desde su Junta Directiva intentan contener muchos de los ataques mediáticos que se dirigen al club, algo que además se ha venido incrementando. Por ello, el también abogado mencionó que este "es el ataque más feroz que está sufriendo la entidad en su historia. Pido a los barcelonistas, que nos mantengamos unidos en la defensa del escudo, de la esencia fundacional y en el modelo de propiedad de socios y socias. Pido a los barcelonistas que estemos al lado del club".
La rueda de prensa dejó tiempo suficiente para todo y desde su posición de presidente, Laporta no dudó en atacar a algunas partes que cree que no están actuando de la mejor manera. El mejor ejemplo fue su postura ante el Real Madrid, así como sus declaracione sobre Javier Tebas y la prensa que ha buscado desprestigiar al club con el pasar de los días.
Un momento importante de la comparecencia de Laporta llegó con un mensaje de tranquilidad del presidente culé para todos los socios y aficionados. "El Barcelona no ha cometido ningún delito. El Caso Negreira no es ningún delito de corrupción deportiva. prestaban unos servicios que estaban documentados. Por eso, creo que queda claro que no había ningún delito", zanjó el 'presi'.
Un trabajo que ha sido hecho con intenciones claras
El también empresario catalán ha querido destacar igualmente que "el Barça sería víctima y no responsable de ningún delito", esto en el caso de que algunos de los involucrados haya intentado o podido aprovecharse de la situación para hacer alguna acción irregular. "Es importante manifestarlo porque dentro de la Fiscalía también parece que trabajan en ese sentido".
La defensa de Joan Laporta ha tenido varios puntos importantes, y uno ha sido el dejar claro que desde dentro del club han trabajado con la mayor transparencia posible en referencia con el 'caso Negreira'. "Desde 2016, el Barça tiene un departamento de Compilance. Lo que me da confianza es que estos profesionales hicieran su trabajo. Este departamento trata de detectar posibles conductas irregulares dentro de la entidad. Bajo mi presidencia hemos reforzado este área siguiendo las líneas marcadas por la jurisprudencia más reciente en este campo. Hemos dotado a este área de más recursos", finalizó.
Precisamente ese departamento "ha encontrado cientos de informes y 43 vídeos, además de cuatro informes de otros temas". Todo eso sería parte de las asesorías brindadas por la compañia de Enríquez Negreira y su hijo, en este caso entre los años 2014 y 2018. "Creo que tendríamos que contextualizar que ha sido un trabajo cuantioso hecho por personas capacitadas. Cuando hacemos referencia a pagar al exvicepresidente del CTA, también hay que precisar. El prestador de los servicios era el hijo de Negreira. El vicepresidente del CTA no tenía capacidad para alterar resultados deportivos. No podía designar árbitros y alterar así resultados. Insisto, lo dice el articulo 29 de la RFEF, esta hipótesis que se ha creado es falsa", zanjó el presidente del FC Barcelona.