Tras confirmarse la renovación de Marc-André ter Stegen hasta 2028 y a las puertas de anunciar los nuevos contratos de Xavi Hernández, Lamine Yamal y Alejandro Balde, el FC Barcelona se había planteado el objetivo de asegurar la continuidad de Frenkie de Jong más allá del 2026, cuando expira su actual acuerdo. Es uno de los jugadores más importantes de la plantilla y cuenta con toda la confianza por parte del cuerpo técnico y la directiva. 

La intención de los blaugrana es repetir la fórmula del guardameta de Mönchengladbach, que accedió a renovar su vínculo por tres años más asumiendo una rebaja salarial por los primeros dos cursos. No será 'gratis', puesto el Barça tendrá que pagarle más cuando se acerque el final de su contrato. El diferimiento de salario que ya era muy 'famoso' en el club en los tiempos de Josep María Bartomeu y al que Joan Laporta y compañía le han dado continuidad. 

Con Frenkie de Jong no será sencillo

Desde hace algún tiempo son muchos los rumores sobre que el Barça intentará comenzar a negociar con el centrocampista de 26 años, pero tal y como informan desde 'MARCA', todavía no se ha producido un acercamiento oficial. Deco, director deportivo del club, tiene muy claro que el primer paso será restaurar la relación con el jugador después del 'divorcio' en 2022 cuando los blaugrana intentaron venderle al Manchester United para cuadrar cuentas. 

El caso es que De Jong no ha 'olvidado' y, de momento, se resiste a comenzar conversaciones para extender su estadía en la Ciudad Condal. Se ha informado que el jugador "no tiene ninguna prisa" por activar el tema de su contrato y que no dará facilidades al Barça, porque todavía quedan tres años más de su acuerdo y queda mucho dinero pendiente por cobrar después de su renovación en 2020, en medio de las pérdidas por el COVID-19, en la que el neerlandés accedió a diferir su sueldo. 

Se avecina un lío en el Barça

Así pues, de momento es muy complicado que pueda concretarse la renovación de Frenkie de Jong a corto plazo y el Barça lo veía como una necesidad absoluta para cuadrar sus cuentas y reducir el margen salarial, porque el neerlandés es el jugador con el sueldo más elevado gracias al diferimiento de los años anteriores. En esta campaña, sin ir más allá, le corresponde cobrar 27 millones de euros fijos btutos, a la espera de bonus. Es una realidad complicada para el club.