"El equipo está confiado, es un gran partido, ante un Madrid que también ha mejorado. Estamos luchando por el máximo y los dos queremos ganar la Liga. El partido de mañana es muy importante". De esta forma comenzó Ronald Koeman su rueda de prensa previa al Clásico contra el Real Madrid. El técnico dejó clara la importancia del encuentro ante los madridistas, aunque también admitió que no será definitivo para LaLiga.
"El resultado no es decisivo porque después del partido de mañana aún quedarán muchos partidos, pero sí es verdad que el momento es importante y el equipo que gane le dará una moral importante para seguir", apuntó. Ahora mismo, el FC Barcelona está dos puntos por encima de los blancos, por lo que ganar significaría dejar a los merengues muy lejos. En caso de perder, los merengues se pondrían por delante y todo se complicaría.
Además, recordó el Clásico de la ida que perdió el Barça 1-3. "Antes del descanso en el Clásico de la primera vuelta tuvimos ocasiones para ir por delante, luego el penalti influyó en el resultado. Hemos mejorado cosas, aunque no es cierto que en aquel momento estuvimos mal y ahora mejor. En efectividad hemos mejorado, hemos cambiado el sistema, el equipo ha cogido buena forma y tiene energía y es lo que pido para mañana. Ser nosotros mismos aunque delante esté el Madrid", señaló.
También quiso resaltar las cualidades del Madrid y la relevancia que tiene un duelo de estas características e insistió en que los suyos saldrán con todo. "Un Clásico es un partido diferente a los demás. Nosotros estamos luchando por ganar la Liga después de una muy buena racha y el Madrid es el Madrid. Han tenido demasiadas críticas pero están ahí, no soy partidario de la gente que ha criticado tanto al Madrid porque tiene jugadores impresionantes. El equipo que esté fuerte físicamente y sobre todo mentalmente, tiene opciones de ganar el partido", indicó.
No quiere entrar en polémicas arbitrales
Una de las grandes polémicas de la previa del partido es el cambio de árbitro tras la lesión de Mateu Lahoz. El sustituto será Gil Manzano, aunque Koeman prefiere no entrar en controversias. "A veces se habla demasiado de los árbitros. Creo que cualquier árbitro es honesto y pita lo que ve y tiene la ayuda del VAR. El árbitro que no puede pitar por lesión es un muy buen árbitro y el que pita mañana también lo es. No tenemos que estar pendientes del árbitro y tenemos que centrarnos en nuestro equipo", destacó.
Por otro lado, lanzó un 'dardo' a Jürgen Klopp tras sus palabras contra el Alfredo Di Stéfano antes y después del Madrid-Liverpool. "Es querer desprestigiar a un club grande como el Madrid, que ha elegido este momento sin público para hacer obras en su estadio. Ellos están acostumbrados a jugar en este campo, los rivales tienen que jugar allí y no es un tema importante para mí", comentó.
Por último, defendió su trayectoria en el banquillo del Barcelona y su labor con los más jóvenes. "Cualquier entrenador necesita tiempo y paciencia para poder hacer cambios en el equipo. Cambié el sistema, perdimos partidos que no merecíamos perder, hemos hecho diferentes cosas, pero lo más importante es que hemos trabajado juntos y fuertes, tenemos jugadores muy jóvenes y con ellos hay que tener mucha paciencia", finalizó.