Si algo demostró José Arnáiz este martes en la Nueva Condomina, es que tiene desparpajo. No se hizo pequeño en su debut con el primer equipo del FC Barcelona, ni mucho menos. El de Talavera de la Reina se destapó como una de las jóvenes promesas del Barça con mayor futuro, no sólo por el golazo que marcó desde fuera del área para sentenciar, sino por el juego que mostró a lo largo de todo el partido.
No se cansó de encarar a la defensa rival, buscar balones al espacio, controlar al pie, regatear, marcharse por velocidad y lucirse con una calidad técnica exquisita. Precisamente algunos de esos detalles técnicos sirvieron para generar onomatopeyas de admiración en las gradas de la Nueva Condomina, y también elogios de los barcelonistas a través de las redes sociales.
Especialmente aplaudida fue la ruleta que realizó en el interior del área rival, en la segunda mitad, que le valió para huir de la presión de tres defensores rivales y generar una jugada de peligro que tuvo que acabar siendo desarticulada por la intervención del portero.
Arnáiz tiene picardía y ambición, dos cualidades que le han hecho progresar en muy poco tiempo hasta marcharse del Valladolid para llegar al Barça B y, desde allí, llamar la atención de Ernesto Valverde y, a partir de este martes, de todo el barcelonismo.
Arnáiz, el diamante que quiere pulir el Barça
Ya no sólo se pondrá el foco en Carles Aleñá, a partir de ahora, cuando se miren los partidos del Barça B. El FC Barcelona ha sabido encontrar en Arnáiz a una joven promesa que quiere cuidar al máximo para que, con el paso de los meses y los años, pueda convertirse en un jugador muy útil para formar parte del primer equipo azulgrana.
Tras la ruleta de este martes dentro del área, en comunión con otros detalles técnicos fantásticos y el golazo marcado en la Nueva Condomina, el jugador del filial ya puede decir que ha empezado con buen pie su andadura en el primer equipo. Si sigue así, pronto llegarán más oportunidades.