El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, concedió una nueva entrevista y por supuesto varias de sus frases más destacadas han tenido relación con la economía de la entidad azulgrana. En una conversación con 'La Vanguardia', el directivo detalló algunos puntos sobre el regreso del club al el próximo año Espai Barça, pero también ha revelado un dato muy importante sobre Leo Messi.
Y es que a pesar de que el jugador argentino se marchó del club hace dos temporadas y que este verano no ha podido volver, Laporta ha asegurado que "tenemos pagos pendientes con él hasta 2025", señaló. "Lo que se le debe es lo del diferimiento de la masa salarial que se pactó con la anterior junta y que produce pagos pendientes que terminan en el 2025. Se le paga religiosamente", ha explicado Laporta.
No ha terminado siendo el momento correcto
Sobre el no regreso del rosarino, el máximo mandatario culé detalló que "teníamos pactado con LaLiga que para Messi dedicaríamos una parte de los recursos que tenemos. Dentro del plan de viabilidad estaba contemplado. Se lo comunicamos a Jorge Messi. Me dijo que Leo había pasado un año muy difícil en París y que quería menos presión. Con nuestra opción, él hubiera seguido teniendo presión y entendí su decisión", ha subrayado Laporta.
La próxima temporada el Barça jugará en el Estadio Olímpico de Montjuic por las obras de remodelación del nuevo Spotify Camp Nou, una nueva construcción que espera que termine antes de lo previsto para regresar en noviembre de 2024. "Si no sucede, habrá unas consecuencias económicas para Limak. La más fuerte es la de un millón de euros por día de retraso. Pero no pasará", indicó Laporta, que además ha señalado que el Barcelona femenino no jugará la Champions en Montjuic y que es posible que "jueguen de forma itinerante en algunos estadios de Catalunya", señaló.
Una temporada que no tendrá novedades negativas en Europa
Al referirse al torneo europeo femenino no quiso dejar pasar la oportunidad también para recordar la posición positiva que obtuvo el Barça tras la investigación de la UEFA al club por el 'caso Negreira'. El dirigente ha reconocido que "estaba convencido de que así sería y estoy feliz" en cuanto a que los culés puedan disputar la Champions, añadiendo además que "confiaba en mi olfato y tenía información. Lo contrario no tenía sentido, era condenar a un club antes de juzgarlo", resaltó.