Ansu Fati tiene dos temporadas siendo la máxima ilusión a futuro del Barcelona, en un barco que se han subido De Jong y Pedri recientemente. El extremo se perfilaba como el heredero ideal para Messi y con la salida del argentino se adelantó todo en el club, por lo que su regreso a las canchas es una de las mejores noticias para el equipo.
Aunque tal vez para el chico no. La presión que supone estar en el Barcelona justo en la salida de Messi podía ser suave para el canterano, pero la salida de Griezmann deja un peso mediático considerable que alguien tiene que tomar, sabiendo que el futbolístico no es tan grande porque Depay lleva buenos partidos en este arranque de temporada.
Una reciente encuesta de Fútbol Club Barcelona Noticias preguntó al lector sobre la herencia de Ansu Fati en el club, comenzando por el dorsal 10 en su espalda luego de muchos años dejando pinceladas y golazos dentro y fuera del Camp Nou. No se cortaron y dejaron una opción como clara ganadora, aunque corta distancia.
Un 42% aseguró que sí confía en que Ansu Fati cargue con el peso del número en su espalda, a falta de saber lo que pueda pasar en el futuro con su regreso a los campos y lo que Koeman decida con su posición. 29% considera apresurada la decisión y otro 29% dice que no debería portar el dorsal.
Cerca de la mitad siente confianza plena en que Ansu Fati sea el 10 del club pero la distancia con las otras opciones puede salvar la medida que tomó el club. De momento, los entrenamientos mostrarán si está listo o no para jugar inicialmente, que de estarlo, seguramente lo intentará con mucho ímpetu.
Confianza de todos
Koeman, Laporta, los capitanes y todos los que conforman la familia del Barcelona tienen una confianza plena en que Ansu Fati será el gran heredero de Messi o al menos, el mejor jugador del club los próximos años, por lo que el apoyo no será el factor faltante en el crecimiento del futbolista.