Leo Messi fue el jugador con más ritmo del partido este martes contra el Atlético de Madrid, a pesar de que fue Luis Suárez el encargado de recoger un rechace para marcar un gol que acabaría dando el pase definitivo al FC Barcelona rumbo a la final de Copa del Rey 2016-17.
La cuestión es que el "10" del FC Barcelona, a pesar de que estuvo algo intermitente durante los minutos de dominio del Atlético en la primera mitad -como el resto del equipo-, protagonizó con el paso de los minutos apariciones que generaron siempre peligro para la portería de Miguel Ángel Moyá y además sirvieron para que el Barça desequilibrara en el centro del campo.
Sin ir más lejos, puede decirse libremente que la jugada del gol de Luis Suárez, que acabó siendo esencial para el pase del Barça a la final, nació de sus botas. Messi realizó un eslalon en el que sorteó a varios jugadores del Atlético de Madrid para finalmente acabar lanzando un "latigazo" raso y potente con la pierna izquierda.
La magia de Leo Messi nunca deja de maravillar
Moyá desvió el esférico, pero ahí estaba Luis Suárez para mandarlo al fondo de la portería. En la segunda mitad, además, un tiro de falta directa hizo levantar al público de sus asientos. "La Pulga" había estado a punto de volver a maravillar al barcelonismo con otro golazo de falta, esta vez muy lejana, aunque por desgracia el esférico acabó estampándose en el larguero y saliendo repelido.
En cualquier caso, no sólo por eso daremos desde "FCBN" el "MVP" a Leo Messi. La realidad es que el argentino fue vital a la hora de desequilibrar en el centro del campo, mantener la posesión del Barça, recuperar balones y lanzar contragolpes peligrosos.
Por último, pero no menos importante, supo controlar a la perfección cada uno de sus movimientos para evitar una tarjeta amarilla que le habría apartado de la final de la Copa del Rey 2016-17. Una final en la que, por cierto, no estará Luis Suárez.