Si bien es cierto que el FC Barcelona podría haberse llevado los tres puntos de Mestalla, también podría haberse ido de vacío. Y es que, además de que el colegiado Iglesias Villanueva no dio por válido un clarísimo gol de Leo Messi que entró un metro en el interior de la portería de Neto, el FC Barcelona empezó perdiendo el partido en la segunda mitad, tras el gol de Rodrigo en el minuto 60.
Por fortuna, el FC Barcelona jamás le perdió la cara al partido y supo reponerse para contrarrestar la intensidad de los 'chés'. Así, poco a poco volvió a obtener el dominio total del juego -pese a algunos contragolpes del Valencia- y, de esta manera, en el minuto 83 consiguió igualar el encuentro gracias a una jugada en la que Leo Messi volvió a ser clarividente.
El genio rosarino vio a la perfección la internada de Jordi Alba en el área para colocarle un balón medido por alto, que el de L'Hospitalet cazó de primeras con una volea muy sutil con la que logró batir al guardameta valencianista, Neto.
El Barça nunca perdió la cara al partido
El FC Barcelona había empatado el partido, y aunque siguió atacando para conseguir el gol de la victoria, tampoco se puso nervioso y quiso mantener el equilibrio para, al menos, asegurar el punto obtenido en Mestalla.
Y es que se trata de un punto muy importante, teniendo en cuenta que gracias a él los culés pueden mantener la ventaja de cuatro puntos con respecto al Valencia al frente de LaLiga Santander, mientras que tan sólo pierde dos puntos de diferencia en relación a Real Madrid y Atlético, que están a ocho. El FC Barcelona, con Valverde, está aprendiendo a tener visión largoplacista. Y eso, señores, es crucial a lo largo de la temporada.