MOCIÓN DE CENSURA A LAPORTA
¿Moción de censura desactivada? La oposición estaba en su derecho pero perjudicaba al Barça
Publicación:7/01/2025 - 11:02h
Actualización:7/01/2025 - 12:52h
En momentos de crisis como este lo más importante debería ser el Barça y el objetivo prioritario la defensa de sus intereses. Unidos, evitando la división y dejando a un lado las diferencias. Una vez superado, será el momento de pedir explicaciones y exigir responsabilidades
La oposición ha dictado sentencia a la gestión de Joan Laporta al frente del FC Barcelona, exigiendo su dimisión inmediata y advirtiendo que en caso contrario activarían una moción de censura. Vaya por delante que, la posición de todos los grupos opositores merecen el máximo respeto y que, lógicamente, tienen todo el derecho a denunciar el actual modelo de gestión del club. Sin embargo, la inscripción de Dani Olmo y Pau Víctor lo cambia todo.
👉🏻El Barça ha recuperado el 1:1 del Fair Play y podrá fichar con normalidad 👉🏻Y además conseguirá el OK de la Liga para inscribir a Dani Olmo y Pau Víctor 👉🏻El equipo azulgrana obtendrá medidas cautelares en los próximos 15 días
En los diferentes comunicados que han emitido, los grupos, asociaciones y plataformas dejaban claro que no compartían las decisiones del actual presidente y exigían su dimisión inmediata advertiendo que, en caso de no cumplirse se activarían todos los mecanismos legales que fueran necesarios. Y es que la no inscripción de Dani Olmo y Pau Víctor se había convertido en un problema y había disparado las críticas y incluso amenazaba el mandato de Joan Laporta. El enfrentamiento del club azulgrana contra LaLiga y la RFEF estaba alcanzando niveles impensables y las consecuencias podian ser peligrosas e impredecibles.
Atacar a Laporta es atacar al Barça
La gestión de la inscripción de los jugadores está abierta a la crítica, por supuesto, pero antes de juzgar y condenar al presidente del FC Barcelona era prioritario conseguir las licencias de Dani Olmo y Pau Víctor. Tocaba anteponer los intereses del Barça por delante de los del resto y, en plena batalla contra LaLiga, la RFEF y ahora el CSD, posicionarse publicamente en contra de Laporta le hacía daño al presidente, seguro, pero también a la institución.
En medio de esta crisis, emitir comunicados, pedir dimisiones y amenazar con mociones de censura generaba un ambiente de crispación insoportable, tensionando el club y lo peor de todo, dividiendo y enfrentando al barcelonismo. ¿De verdad valía la pena poner en riesgo al FC Barcelonas? Claramente no, no tocaba eso, lo que tocaba era defender unidos los intereses del club, dejando a un lado todo lo demás.
LaLiga y la RFEF también son responsables
Con toda seguridad la gestión de Joan Laporta y su directiva ha fallado en muchas cosas y le toca asumir la parte de responsabilidad que le corresponde pero, ¿alguién tiene alguna duda que la gestión del fair play financiero por parte de LaLiga y Javier Tebas está llena de irregularidades y decisiones difíciles de explicar y entender? Todas las normativas del 1:1 están llenas de dudas y de interrogantes, de muchas medidas y modificaciones sobre la marcha que merecen y exigen explicaciones. Las polémicas alrededor de la RFEF, su nuevo presidente y designaciones también forman parte de un escenario bajo sospecha de un color blanco que está muy lejos de lo razonable.
Este martes, el Barça ha pedido la cautelarísima al CSD para poder inscribir a Dani Olmo y Pau Víctor, pero este no era el único movimiento previsto en las oficinas del club azulgrana. Según informaba el diario Sport, Jordi Farré, socio del club y exprecandidato en las últimas elecciones del Barça, podría presentar este mismo martes la documentación necesaria para que se pudiera convocar una moción de censura.
Por suerte, otros grupos opositores con los que se hizo el frente común contra Laporta estarían frenando esa moción porque los plazos no serían los adecuados. Falta de quórum, pues, con la mayoría de los grupos de la oposición, ya que creen que es precipitado. Además, para que la moción prospere, deberían reunir más de 16.000 firmas en diez días, el Barça no vuelve a jugar en casa hasta finales de enero y 'caso Olmo" parece cerrado.