En una reciente intervención en el podcast 'Proper Football' de Kammy y Ben, Cesc Fàbregas ha enumerado los motivos que le llevaron a regresar al FC Barcelona en 2011 procedente del Arsenal y, también, cómo le hubiese gustado esperar un poco más de tiempo para volver a 'casa' y así tener más protagonismo. Pep Guardiola, que le llamó, tuvo un papel clave en su decisión. 

El futbolista formado en La Masia, que se había marchado a Londres en 2003, confesó que tras la llamada de Pep Guardiola y el éxito que estaba consiguiendo el Barça en ese tiempo, lo llevaron a tomar la decisión de hacer sus maletas y marcharse de un Arsenal donde estaba frustrado por no ganar títulos: "Decidí volver al ver a todos ganando en Barcelona, y jugando tan bien y Pep llamándome y mandándome mensajes...decidí que ese era el siguiente paso para mí", confesó. 

Cesc no acertó en los 'tiempos' para volver al Barça

A pesar de que ha confesado que jugar en el primer equipo del Barça era su sueño desde muy pequeño, entiende que tuvo que haber esperado un poco más para regresar, porque la competencia fue máxima y difícil de asumir: "Mirando hacia atrás ahora, probablemente debería haber esperado un poco más hasta que Xavi se apagara un poco e ir allí para ocupar su lugar. Pero a causa de la frustración de tantos años sin ganar en el Arsenal y sintiendo que a veces el club no estaba acertando en los fichajes, me estaba agobiando y decidí marcharme".

Fàbregas insistió en que "era hincha del Barça y era mi sueño jugar en el primer equipo desde que era niño, pero fue muy duro porque el Arsenal me dio muchísimo y me sentí muy querido por todo el club, por la afición. La confianza que me habían dado desde muy, muy joven... fue súper, súper duro". 

El regreso frustrado de Cesc al Arsenal

En 2014, cuando iba a salir del Barça, se llevó la sorpresa de que desde el Arsenal le habían 'cerrado' las puertas de cara a un posible regreso: "Al fichar por el Barcelona en el contrato decidimos que, si salía, el Arsenal tendría una opción preferente durante una semana. Les avisé, en una semana no hablé con nadie y Wenger me dijo que lo había pensado y que ya tenían muchos jugadores en mi posición como Mesut Ozil, Cazorla, Jack Wilsherz, Aaron Ramsey y que para encajarme tendría que echar a alguien y esto podría crear problemas", dijo. 

Acabó fichando por uno de los 'enemigos' del Arsenal, el Chelsea de José Mourinho, quien le había pedido personalmente que se convirtiera en el líder del equipo: "Hablé con Mourinho, lo conocí y me dijo cosas muy agradables de escuchar. Quería que yo fuera el líder de ese equipo. Me convenció y me fui para allí", dijo, destacando que "tenía algunas opciones y una de ellas era Chelsea. Hablé con Mourinho, lo conocí. Me dijo cosas que fueron muy agradables de escuchar. Quería que yo fuera el líder de ese equipo. Me convenció y me fui allí".