Neymar no se está adaptando bien a su nueva ciudad. Su fichaje por el Paris Saint-Germain, que parecía que le haría cumplir el sueño de liderar un equipo aspirante a todo, se está quebrando por momentos. Los problemas con algunos integrantes del vestuario, su falta de adaptación a la ciudad de París y las diferencias con su técnico, Unai Emery, hacen que el brasileño no se sienta a gusto.
En la última visita de Neymar a sus ex compañeros del vestuario azulgrana, el delantero habría soltado una bomba. Según Diario SPORT, el brasileño habría preguntado si sería aceptado de vuelta por los futbolistas del FC Barcelona. "¿Me aceptaríais de vuelta?", habría preguntado el delantero a sus ex compañeros según el citado medio de comunicación.
Habría sido en una reciente visita sorpresa del brasileño a la Ciutat Esportiva de Sant Joan Despí. Según informa el rotativo, abrazó a sus ex compañeros y, junto a su hijo Davi Lucca, mantuvo conversaciones con sus amigos más afines en el vestuario culé.
La incomodidad de Neymar
La falta de felicidad de Neymar en París le estaría haciendo replantear demasiadas cosas. Pese a haberse convertido en el jugador mejor pagado de toda la historia del fútbol, parece que nada es suficiente para olvidar lo que vivió en el Camp Nou a través de cada una de sus temporadas de azulgrana.
Sin embargo, ese sentimiento choca con sus declaraciones totalmente críticas con la junta directiva del FC Barcelona y con sus últimas acciones legales, mediante las cuales pretende cobrar los 26 millones de euros que la entidad azulgrana depositó en una notaría en concepto de bonificación por renovación. Una renovación de contrato que se llevó a cabo, pero que Neymar no cumpliría para abrazar los petrodólares.