El pasado martes 31 de agosto a la medianoche cerró el mercado de fichajes (verano 2021), en el cual el FC Barcelona gracias a la operación salida impulsada por el presidente de la entidad catalana, Joan Laporta, ingresó hasta 86,3 millones de euros con ocho ventas invirtiendo solo 9,5 millones de euros. Como ya sucedió en 2003 y 2008, se ha remozado la plantilla, pero fichando a coste cero y dando hasta 15 bajas, entre ellas una muy significativa, la del astro argentino Leo Messi, quien se ha marchado al París Saint-Germain (PSG). No fueron unos meses fáciles para la entidad catalana, que ahora afronta un nuevo proyecto encabezado por el entrenador neerlandés Ronald Koeman, quien tienen la misma misión que su compatriota Frank Rijkaard y Pep Guardiola: recuperar al equipo y alcanzar la gloria lo más pronto posible.
El objetivo de Laporta es claro: regenerar el Barça como ya hizo en 2003 y 2008. Para ello, sabe que es fundamental la mano de hierro; esa que no le ha temblado el pulso en las últimas semanas pese a la tormenta que le ha caído encima. Pero ese no un escenario desconocido para el empresario y abogado. Por ejemplo, trece futbolistas salieron en el 2003 (entre ellos Riquelme y Frank De Boer), 10 en el 2008 (con Ronaldinho y Deco como grandes sacrificados) y 15 en el 2021, con el jugador más goleador de la historia de los azulgranas incluido.
Ahora, Laporta debe sentarse y esperar que su proyecto comience a lanzar flores, si es que esto llegar a suceder, bien sea a corto, mediano o largo plazo. El Barça de Rijkaard y Ronaldinho ganó dos Ligas y una UEFA Champions League (UCL) y el Barça de Guardiola tres Ligas y dos UCL (sextete incluido). De ese tamaño es el reto que tiene por delante junto a Koeman, de quien ya se especula se trabaja para su renovación, inmerso en una ola de críticas por sus planteamientos en los últimos encuentros del conjunto culé.
Laporta y la crisis financiera
De momento, vale destacar que el club logró pasearse por el pasado mercado de fichajes invirtiendo, únicamente, 9,5 millones de euros (aquellos que se pagaron por Emerson Royal, quien llegaba con el cartel de asumir los galones de Dani Alves, pero como ya se ha señalado, no pudo ser) e ingresando 86,3 millones; lo que supone un balance en positivo de 76,8 millones de euros. Toda una cifra récord en la historia del conjunto catalán.
Esta gestión marca así un contraste importante en relación con las dos primeras. Esto último, recordando que el Barça tuvo un balance negativo de 33,1 millones de euros en la primera "revolución" de Laporta y de 41,6 millones de euros en la segunda. Pero en esta tercera tiene un beneficio de 76,8 millones de euros. Fichajes ‘low cost’ y La Masía son las banderas del proyecto, además del apoyo de los sobrevivientes de la 'vieja guardia'. Ahora, solo queda esperar.