En una situación que se veía venir, la Juventus ha notificado al FC Barcelona y al Real Madrid que inicia los trámites legales para salir del proyecto de la Superliga tras una temporada en la que el equipo italiano ha cambiado por completo a su junta directiva. El proceso, que tardará algunas semanas, se iniciará tras una decisión firme por parte del club de Turín para intentar llevar una nueva era lo mejor posible.
Impulsada en principio por 12 de los mejores clubes de Europa en abril de 2021, la Superliga se quedará sin uno de los tres clubes que se mantenía firme en realizar el proyecto. Los problemas internos de la Juve hacen que la entidad se exponga a que la UEFA pueda expulsarle durante tres años de las competiciones europeas debido a los casos en los que se ha visto involucrado las últimas temporadas, apuntan algunas informaciones.
Dos versiones que contradicen todo el problema
Sin embargo, el club italiano niega en un comunicado este hecho y asegura que no han recibido ningún tipo de presión por parte del máximo organismo del fútbol europeo. La salida del equipo italiano del proyecto significará que únicamente Madrid y Barça se mantendrán al frente de una posibilidad que iniciaron junto a Manchester United, Manchester City, Liverpool, Arsenal, Chelsea, Tottenham; Atlético de Madrid, Juventus, Inter de Milán y AC Milan.
La información de 'AS' al respecto apunta también que fuentes de la Superliga aseguran que en el entorno del proyecto existe preocupación por las amenazas sufridas por la Juventus para que dé un paso al lado en el proyecto. Los involucrados se mostraron sorprendidos por lo que consideran un comportamiento abusivo del máximo organismo del fútbol europeo y emprenderán acciones legales para proteger su postura si fuese el caso.
Deberán seguir esperando por una resolución
Con esto ocurriendo, el proyecto de la Superliga está pendiente de la sentencia que tiene que dictar el Tribunal de Justicia de la Unión Europea acerca de la viabilidad o no de la nueva competición. El fallo se esperaba para finales de mayo, pero el nuevo calendario que maneja el TJUE establece que la sentencia se puede conocer a partir de julio, pero se podría retrasar hasta el mes de septiembre por la inactividad que se presentará durante el mes de agosto.